Erase un bosque poblado de orugas. Parecìa que todas las orugas eran felices; el bosque las proveìa de todo, sus necesidades estaban cubiertas. Una de ellas tenìa preguntas que nadie contestaba, con forme pasaba el tiempo preguntaba màs y màs, pero su diàlogo era interno y no se detenìa, poco a poco fuè teniendo respuestas, respuestas que estaban a la vista del ojo capaz de ver y del oìdo que sabe escuchar, por que a toda pregunta habra una respuesta y no se necesita ni cambiar de residencia, ni de alimentos,ni de forma de vida, todo està dentro de ella y en su entorno a donde quiera que vaya. Un dìa tomo la decisiòn de actuar con forme a sus respuestas, contruyò un capullo ò matrìz y entro en el; ella sabìa que habìa seres a su alrededor algunos ignorando lo que pasaba dentro y tratando de averiguarlo y si era posible de romper el capullo, otros ni cuenta se daban que ya no estaba, pero tambièn quienes sabian perfectamente lo que ocurrìa dentro y ayudaban protegiendo el capullo desde fuera, por que saben que la Transformaciòn es individual y no tiene tiempo lìmite, que esta cargado de paciencia y voluntad, pero mientras haya decisiòn y acciòn el cambio se dà, por que el trabajo que ha comenzado en espiritualidad se verà manifestado al salir del capullo en Alas, que le permitiran ascender y descender a dar un servicio a sus hermanas orugas, despertando en algunas de ellas el deseo de Transformaciòn, ella sigue siendo vulnerable a las tempestades y se sigue preguntando, ahora su camino es aùn màs comprometido, por que el saber ( conciencia) le dá mayor responsabilidad.

Gracias a los que cuidan mi capullo, a los que quieren saber que pasa y a los que ni se enteran, a los que tratan de destruirlo; por que todos y todo forma parte de mi proceso evolutivo.
De lo profundo de mi Ser. Cisne Shakti