Un Distinguido Hermano Visitador
Era una noche lluviosa de Marzo de
2012, era una noche de sesión en una antigua logia de un poblado del Noreste de
México, luego de las 8:00 PM, los hermanos se reunían como era
costumbre. Así, algunos vestían la Logia, otros revisaban la correspondencia,
algunos otros limpiaban la letrina, otros más preparaban los alimentos que
servirían de cena ágape luego de la
Tenida. Todos hacían las labores propias
previas a una cesión masónica mientras conversaban amenamente.
Justo un minuto antes de comenzar los
trabajos propios de los masones arreció
la lluvia, luego el aire tempestuoso, a
tal punto que la luz eléctrica falló y se quedaron a oscuras. Estos hermanos
eran previsores y tenían quinqués de petróleo y con las velas alumbrarían el
altar.
Mientras esto sucedía un hombre
moreno de baja estatura y portando un elegante traje negro, se presentó a las puertas de la Logia aún con
las puertas abiertas. Y con voz alta
saludo diciendo ¡Saludos Fraternos Mis Hermanos! Vengo a acompañarles en sus augustos trabajos ,
claro si me consideran digno de una plaza entre vosotros , estoy a sus
órdenes y dispuesto a ser retejado.
Los hermanos de logia , no le conocían,
se miraron por unos momentos entre ellos,
gustosos y con curiosidad se acercaron al Hermano visitante. Saludaron
al visitante, y en lo apresurado del momento el hermano fiscal no sin sorpresa apuntó
su nombre y los pertinentes datos de su Logia, así al mismo tiempo que el
fiscal notó las ropas del visitante estaban completamente secas, pero no dijo
nada.
La luz de las lámparas de petróleo ,
alumbraban débilmente el sublime recinto,
las velas del Ara se encendieron, y en ese orden se disponían los trabajos.
Los hermanos de Logia, observaban los
rasgos indígenas del visitante, sentado en la columna B, Él permanecía inmóvil, como una estatua de ébano ,
lo blanco de sus ojos resplandecía con un destello imposible, la sensación de
su presencia era de una profunda paz, mientras que la tormenta afuera de Logia
arreciaba con furia, adentro de Logia se sentía un caluroso ambiente de
seguridad y comodidad.
Luego de un momento , donde fueron
agotados los tramites propios de la apertura, se concede el uso de la palabra ,
a esto el hermano visitante pide el uso de la palabra , la cual le fue
concedida por el Venerable Maestro de la Logia.
Toma la tribuna de la Logia, y comienza
su alocución diciendo:
Vosotros me conocéis , bien sabéis en sus corazones quien soy, y lo que os diré esta noche lo sé algún día será sabido y
comprendido por miles de masones de todo el mundo.
Con el correr de los años, la flama de las libertades tiende a debilitarse casi por
completo , y el oscuro humo de las mil perversidades tiende a ahogar las
Naciones, y es cuando nosotros los masones debemos comprometernos a dar un
impulso de dinamismo a las actividades propias
de los masones que son la democracia, la igualdad , el derecho, La Libertad y el efectivo respeto entre
ciudadanos.
Los Masones que escuchaban a este
hermano masón estaban impresionados, pues aunque estas palabras parecían comunes,
no lo eran tanto; y dichas por este masón de rasgos indígenas parecen tener un
eco en sus almas. Pues era más en su poderosa
forma de decirlas que el impacto en
ellos parecía con una fuerza increíble , a tal punto que les llamaba a la acción, y en ese momento estas palabras parecían hacerles
levantarse de sus asientos y salir a luchar por los ideales que este masón les
inyectaba. Este hermano visitador tenía una forma de decir las cosas que aún eran unas cuantas líneas
, ya todos habían comprendido el leitmotiv de todo el asunto.
Y el Hermano visitante luego de una
pausa como mirándoles a todos y cada uno
se ellos continúo: No se
deben sentir solos pues sabed que Dios está de vuestra parte, y que el pueblo
todo será convencido fácilmente de que vosotros masones estáis para
reconquistarles las libertades que les fueron arrancadas por el Clero, los
usureros y los malos gobiernos. Por ello
, no neguéis al pueblo que sois masones, pues yo nunca lo he negado, el pueblo
en sus corazones sabe que los masones estamos de su lado y nunca en contra de ellos. Y maldito por siempre sea el corazón de un masón que atente contra
el pueblo, pues nosotros somos los defensores del pobre y del angustiado.
Los hermanos de esa Logia, asombrados veían como un claro resplandor
emanaba del Hermano en la tribuna y en un momento parecía engrandecerse tanto
como un gigante, y al otro instante simplemente parece un hombre moreno con rasgos netamente indígenas.
El Hermano Masón en la tribuna , alzó
su mano derecha con majestad y concluyo diciendo: Yo ahora os anuncio el
comienzo de una nueva, donde deberías luchar por la independencia y la
reconquista de los valores masónicos libertarios que el pueblo ha perdido. Pero al mismo tiempo
yo os anuncio que el pueblo y los masones saldremos victoriosos.
Así, el hermano visitador al momento que dejaba la columna de la elocuencia , pidió
cubrir el templo, lo cual le fue concedido y dejando el sagrado recinto dejo
sus medallas en la columna B.
Todos por un buen momento se quedaron
sin habla , ante lo dicho por el masón visitante. Y fue cuando el Venerable Maestro le pide al
Hermano Orador que tomó sus datos le diga cómo se llamaba el Hermano visitante
y de que logia era. El hermano orador con voz temblorosa contesta el Hermano
era de la RLS Independencia 2 su hombre
es el Q:. y V:. H:. Benito Pablo Juárez García. – Alcoseri