El Viejo Orden y El Nuevo Orden Hace miles y miles de años, cuando el Ser Humano apenas y comenzaba en este planeta, las cosas entre el Ser Humano y Dios eran totalmente diferentes. El Orden parecía Perfecto, y digo parecía Perfecto pues todo estaba de tal manera así dispuesto para en cuanto un ser humano hiciera una buena obra y al tiempo le fuera recompensada al instante, y si hacia alguna mala obra le era castigada inmediatamente.- Dios y el Diablo se miraban satisfechos pensaban así las cosas marcharían intachablemente, a premios inmediatos y castigos al momento (dulce o latigazo). Pero, no pasó mucho tiempo y se dieron cuenta que las personas no evolucionaban, aún peor parecían retroceder, y todo invitantemente iba de mal en peor. Dios y el Diablo se miraban entre ellos sorprendidos, y no acertaban a dar con solución a este grave problema; fue entonces que se dirigieron ambos para preguntarle a un hombre sabio, que era lo que estaba tan mal. El hombre sabio llamado Nosam les recibe, y ambos le cuestión sobre el asunto. El Sabio es cuando comienza a esclarecerles las cosas; miren les dice – El primer punto es que en cuanto una persona en oración y pide algo, tu Dios se lo concedes, sin más miramientos que concedérselo al instante mismo. Y tu Diablo, en cuento un ser humano obra mal, tú le castigas, y así cuando obra bien, tú Dios le premias al momento. Esto ha provocado, que la gente obre en consecuencia mecánicamente, igual no sienten amor por los demás, ni tienen el minimo sentimiento del verdadero amor fraternal, sin tener más interés que la recompensa en sí misma, o no obran mal por temor al castigo inmediato. Entonces Dios y el Diablo se cruzan miradas y sonríen, como muy tranquilizados, es verdad dijo del Diablo, desde ahora, invariablemente el bien o el mal serán premiados o castigados independientemente si obran bien o mal los seres humanos. Si, ahora veremos dijo Dios quienes son verdaderamente honestos para con nosotros y para consigo mismos. El hombre Sabio, les dijo ahora los hombres y mujeres podrán por si mismos subir escalón por escalón por la escalera de la Evolución hacia la Luz, o por si mismos rodar hasta el fondo mismo del Abismo. Dios y el Diablo dijeron entre sí que será divertido ver eso y rieron. Ahora, dijo el hombre sabio no sabrán a ciencia cierta los seres humanos si son premiados o castigados cuando les vaya bien o mal en sus vidas, y no sabrán tampoco distinguir si lo que les pasa es obra ti Diablo o de ti Dios. Si dijo Dios: ahora en adelante nos confundirán; a ti Diablo conmigo y a mi Dios contigo. Bueno, y tú como sabes tanto hombre sabio, el hombre sabio contesta: Haber vivido décadas en un cuerpo de carne y huesos, haberme dado cuenta de mi propia naturaleza finita y de cómo solucionar mi propia problemática, al margen de ustedes dos par de malditos, pues hace mucho que renuncie a obrar esperando un premio o un castigo de ustedes, obrar ligado a las consecuencias permio y castigo en mi me hacía mucho daño, pues no obraba al universal mejoramiento mismo. Dios y el Diablo se quedaron pensativos por unos momentos y se dijeron, valdría la pena probar a ser seres humanos, así como este sabio, y vivir la experiencia muy de cerca y notar las limitaciones, al parecer es provechoso. Dios y el Diablo, agradecen al hombre sabio, y el sabio les despide diciéndoles, no se han dado cuenta que yo soy solamente parte de su propia proyección en este espejo que se llama Ser Humano y ustedes dos parte de la mía.
Fraternalmente Vicente Alcoseri https://groups.google.com/group/secreto-masonico
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