Cuando el entorno de una logia
masónica no es el habitual
Cierto erudito filósofo le dijo a un
Maestro Masón:
Debemos tratar siempre de modo
diferente, al intelectual, que al iletrado, al rico y al pobre, al religioso y
al ateo, etc.
El Maestro Masón discrepó,
argumentando:
La gente cualquiera que sea, se comporta
de la misma manera si se expone a un
entorno diferente. Independientemente si es una persona instruida o no, si es
atea o no, si es rica o no.
Luego el erudito filósofo y el masón,
quedaron de realizar un experimento, a
uno de los más destacados discípulos del erudito filósofo lo enviaron a un
pobre tugurio, y a un joven de clase modesta lo enviaron a convivir con
poderosos magnates políticos, y a un iletrado a asociarse académicos amigos de ambos, del masón y del erudito
filósofo.
Todos ellos se enfadaron y
deprimieron pronto de sus nuevos
entornos, y enviaron e –mails, diciendo. Queríamos estudiar con vosotros
refiriéndose tanto al masón como al filósofo, y se mostraron pronto
desalentados en sus entornos, y sin hacer progresos en sus estudios masónicos o
académicos.
Entonces el Masón mostró los E-
Mails al filósofo erudito y señaló: No puedo encontrar diferencias relevantes en
la conducta de estos tres hombres, todos diferentes y en diferentes entornos.
Envió un E – Mail a los tres en el
que decía: Quería comprobar si eran capaces de prosperar colocados en algún
lugar al que ustedes no están habituados.
Días más tarde, los tres se
encontraron en la casa del Maestro Masón, y a las explicaciones del Masón, entre ellos llegaron a la conclusión de que el
masón, habiendo fracasado en influir sobre ellos de alguna manera en su
adaptabilidad a entornos diferentes, estaba ahora intentando explicar su
conducta en forma que pudiera impresionarles.
El erudito filósofo, atento a como se desarrollaba la trama, después
de examinar a los tres hombres dijo:
Admito que todos ellos han mostrado una
forma de comportamiento similar al no adaptarse a las circunstancias. Pero al
presentarme este experimento, sin duda has violado algún principio masónico,
porque has preferido ganarme en el debate dañando a estos tres, utilizándoles como
simples conejillos de indias.
El Masón contestó:
Al contrario, eres tú quien ha
fallado en la observación, en primer
lugar, estos tres nunca podían en ningún caso haber sido accesibles a la
comprensión de un saber superior masónico.
El masón debe adquirir el poder de adaptarse al medio, para luego
influir en él, por lo tanto, no hubo
desgate a sus potencialidades.
El erudito filósofo, luego insistió:
Si has trabajado con gente que no
tenía la menor posibilidad, no hay duda alguna de que has violado los preceptos
masónicos más elementales. Ésta, debo decírtelo, es mala interpretación de tu
parte. Y agregó: supongo lo que un masón hace estará relacionado con una meta
superior.
A lo que el Masón rebatió:
Te equivocas, porque eliges tus
propias interpretaciones y ese es el vicio en donde han caído los hombres de la
ciencia profana, los académicos, los filósofos, los eruditos han preferido
ignorar el funcionamiento de las condiciones humanas básicas y su relación posterior
con un algo superior encerrado en el mismo ser humano, y que ustedes niegan, y que
está listo a ser despertado. Te lo
explico: La demostración que vistes
sucede a cada momento al iniciarse masón una persona cualquiera en logia masónica ,
donde siempre habrá personas en esa Logia muy diferentes a tu entorno habitual,
ya sea familiar, ideológico, amistoso , laboral , social, económico, etc. el nuevo
masón tendrá que adaptarse tolerantemente a su nuevo espacio iniciático. Saldrán
victoriosos siempre que como masones aprendan sus lecciones, servirá a otros
para aprender y eludir errores semejantes.
Ésta es una parte esencial de la meta superior de la que habla la
masonería. Las palabras sin inútiles por
sí mismas, pero lo que las palabras pueden hacer es el real y autentico reverso
de lo Inútil.
Todo iniciado masón luego de un
tiempo se sentirá en un mundo
ajeno, en un entorno poco habitual , tal
vez se adapte al grupo , o se encapsule o se aísle. Pero en el mejor de los casos el ser humano despierta su
potencial interno siempre que se enfrenta a un nuevo ambiente.
– Alcoseri.