Un gran poder masónico que se determina desde muy dentro de cada uno de Nosotros.
Según el gran drama central de la Masonería es que nos hemos dado cuenta de aquello por lo cual el Mundo gime y al mismo tiempo hasta ahora sufre los dolores del parto, esperando la aparición de un Nuevo Orden Mundial, y es cuando los masones aparecen de pronto en la Escena Mundial en una peculiar manera para ordenarlo todo, crear naciones, formular constituciones y hacer de este mundo un lugar mejor, y de esta tarea llevamos justo 300 años. Pero, entendiendo que la masonería y sus principios son milenarios.
El simbolismo de la masonería es capaz de las más amplias interpretaciones, y en sus signos y contraseñas, saludos, herramientas de albañil, escalones y mobiliario fijo del templo y en el significado de sus Luces Mayores y Menores, se preservan para el iniciado esas verdades esotéricas que todo hombre y mujer deben saber. Es necesario saber - si quiere entender, de hecho, encontrar la Senda - que lo conducirá a usted, a un nivel superior de consciencia, ira "de la oscuridad a la luz, de la muerte a la inmortalidad, de lo irreal a lo real."
La Masonería, por lo tanto, no es sólo un sistema de moralidad, inculcando la ética a través de la cual resultará, a continuación, el desarrollo consciente de la divinidad, La Masonería es también una gran presentación dramática de la regeneración sociopolítica. Ella plasma la recuperación de la divinidad oculta en el hombre y su nacimiento en la luz; la masonería representa la elevación del hombre y de la mujer de su estado caído en el oscurantismo y su elevación ilustrada, y demuestra, a través de lo que es representado en el trabajo de la Logia, el poder de alcanzar la perfección latente en todo hombre y toda mujer, y su capacidad de llegar a la completa visión y comprensión. Todo está en uno mismo y nosotros marcamos el destino. Lo que es verdad para la unidad es verdad para el grupo, y en la Masonería está preservada para nosotros la garantía de la realización final de la humanidad - una humanidad cuyo patrón de medida es la perfección y cuyas filas son llenadas por aquellos que (en las palabras del mismo Libro de la Ley, la Santa Biblia:
“Este trabajo debe continuar hasta que estemos todos unidos en lo que creemos y conocemos acerca del Hijo de Dios. Nuestra meta es convertirnos en gente madura, vernos tal como Cristo y tener toda su perfección.” Efesios 4:13
Una humanidad "compuesta por todos los Seres humanos buenos, en tal síntesis esa es la meta de la Masonería.
Además la Masonería de ser un sistema de moralidad y de un gran drama de regeneración, la Masonería es también una presentación representativa de la Gran Búsqueda de un Nuevo Orden Mundial. Un Orden instintivo en cada ser humano, el deseo de conocimiento y expresión es característica de la evolución del reino humano, y garantía de su verdadera naturaleza. Esta verdad está velada en el significado oculto y esotérico de nuestro Maestro Hiram Abiff, pues Hiram, de acuerdo con muchos estudiantes de la Francmasonería, viene de "Khi," vivo, y "Ram", aquel que es elevado o levantado, Viviente Hijo de Dios que es elevado de su estado caído hacia los "altos lugares", que es otra interpretación del nombre "Ram". "El Yo Superior, es levantado", dijo el gran carpintero de Nazaret:
" Mateo 11:28-30 Reina-Valera 1995
28 Venid a mí todos los que estáis trabajados y cargados, y yo os haré descansar. "
Así, y en estas palabras se encuentra una clave para el misterio central de la Masonería. Abiff significa Padre, que es el término dado en todas las religiones para el Gran Aspecto del Espíritu supremo.
Esta gran búsqueda o investigación está Plasmada para nosotros en los primeros tres grados de la masonería. Se prohíbe al masón mirar hacia la luz directamente, pues podría enceguecer su vista, por eso al aprendiz se le coloca en un lugar en penumbras en el septentrión, según esto las luces que iluminan el Ara pero de forma progresivamente al candidato se la da más y más luz, y paso a paso su búsqueda por el conocimiento es satisfecha a medida que pasa de la Clase de la Ignorancia a sitial en oriente Aula del Aprendizaje, donde las Artes y las Ciencias le entregan sus dones. En él descubre lo que se le espera, se apericia en su trabajo artesanal y algo más aún es necesario. Debe graduarse en algo más grande y mejor. Debe asegurarse de encontrar la Palabra Perdida, pasar por varias pruebas y así probarse a sí mismo, para hacer posible llagar a ser su propio maestro, un partidario de la sabiduría y el instructor de los demás otros hombres y mujeres, pagándoles sus salarios debidos y mostrándoles el ahorro del desgaste en emociones negativas. La Palabra que le ha sido confiada, va con su propia vida, si es necesario saberla utilizar.
Así que la búsqueda se tipifica de tres maneras a través de los tres grados masónicos: En primer lugar, buscar la iluminación, retratado por el avance constante del candidato que va hacia Oriente, y su actitud escucha y aprende, asumiendo lo asumido. A través del conocimiento que se le da a él y en la medida en que deambula circulando o dando circunvalación por el Templo Masónico, descubre que él mismo es triple, una entidad compleja que es la suma total de sus estados emocional, físico y mental, y así mismo oculta o velada, detrás de las meras apariencias. De esas formas aparece de poco a poco, una luz interna análoga a la Gran Luz en Oriente, esta Luz debe ser encontrada.
Esta verdad sobre la búsqueda de la luz divina ha sido frecuentemente expresada en términos de una alegoría bien conocida en Masonería .
En Alegoría se dice lo siguiente:
Hubo una época en la historia de la raza, que viendo los dioses la maldad del ser humano , y fue cuando los dioses privaron al hombre de su divinidad, y, reunidos en alto cónclave, procuraron decidir dónde esconder lo que le habían robado al ser humano. Un dios sugirió que ellos la escondiesen en otro planeta, pues el hombre no podía encontrarla, pero otro dios se levantó y dijo que el hombre era inherentemente un gran viajero y no tenían la garantía de que eventualmente podría encontrar su Camino, y llegar allí. "Vamos", dijo otro dios , "esconderla seria bueno en las profundidades del mar, en el fondo del océano, pues allí estará segura." Pero una vez más una voz discordante se oyó, y señalaba que el hombre era un gran investigador natural y que él podría algún día tener éxito en penetrar en las profundidades más profundas del Océano, así como en las alturas del cielo. Así, la discusión iba y volvía, hasta que finalmente un dios brillantemente inteligente se levantó y dijo: "Vamos a esconder la joya robada de la divinidad del hombre dentro de él mismo, pues allí él nunca va ir a buscar".
Entonces el cónclave de los dioses terminó, todos ellos felices, pues sin ese poder el hombre dejaría de ser un peligro , y a medida que Los dioses observaron que en el interior del hombre era un lugar verdaderamente inaccesible para los mismos hombres, y como había sido indicado así se hizo , y así por miles y miles de años parecía que la luz escondida en el interior hombre estaba perdida para siempre.
Poco a poco, sin embargo, algunos hombres descubrieron el secreto, y los conocimientos adquiridos de cómo la luz se podría encontrar se convirtió en propiedad de ciertos grandes grupos de pensadores, ya través de las escuelas iniciáticas y a través principalmente de la masonería, fue que las leyes que rigen la revelación de la luz fueron descubiertas, y así fue que algunos osados pudieron dar con la Luz, con su propia Luz.
Algunos que dieron con la clave de donde estaba la Gran Luz y de cómo llegar a ella , fue que crearon la Masonería , y fue través de un saber instruido, a través de los rituales y trabajo gradual , fue en que es invitado a participar en esa expedición introspectiva , y comienza a evaluar su ignorancia, y trabajando como él hace en el atrio exterior del Templo del Rey Salomón, se vuelve consciente de Un misterio interior en el que todavía no puede penetrar. Aprende a usar las herramientas del Aprendiz, y, a través de una comprensión de su significado simbólico, trabaja en la construcción del carácter. La luz que recibe es suficiente para revelar su necesidad de sabiduría, y entonces concientiza su carencia de conocimiento.
Pero , aun así los masones , sólo permitimos que los dignos sean capaces de encontrar esa luz en su interior, dar con esta luz conlleva tener un gran poder, poder con el cual puede dañar a los demás o dañarse a sí mismo. Y a muchos masones los engañamos haciéndoles pensar que tienen la clave de Poder, pero no, sólo tiene la ilusión de poseer ese conocimiento.
Alcoseri