Sobre cómo se trasmite el saber masónico 

Siempre hemos sido convencidos a creer que la seriedad está de  alguna manera asociada o ligada a la sabiduría. Imaginamos así  que el aprendizaje sólo puede ocurrir en medio de caras serias y miradas profundas, y hasta con atisbos  de amarguras.

Los cuentos, las fabulas, los chistes, viene a demostrarnos que las cosas no son exactamente así. Tanto los cuentos infantiles como los cotidianos chistes sirven de canales para enseñarnos algo, que de forma directa no asimilaríamos; el absurdo, la anécdota inverosímil es un canal poderoso, para tramitarnos una información, la misma Biblia usa parábolas que son simplemente cuentos, la misma Masonería usa el cuento o historia del Maestre Hiram Abiff asesinado por sus subalternos. Algunos se habrán  dado cuenta que en logias hay masones que usan subliminalmente técnicas de comunicación así, para trasmitir un saber y lo lubrican con alguna anécdota jocosa. Claro esto es muy usado por oradores y quienes manejan la información en televisión y radio.   

Muchos que no saben lo suficiente de Masonería,  y creen es inadecuado este tipo de comportamiento de los masones, muchas veces haciendo y diciendo algo absurdo a mitad de una Tenida o de un Ágape Masónico. Y créame es una muy poderosa técnica de disuasión, de descongelamiento y de trasmisión de una poderosa idea.  Seguro usted habrá leído algo escrito por mí de manera de Cuento o de chiste, pero igual, al contacto de que yo escriba algo le puede parecer irritante y le puede incluso ser chocante, aberrante o le puede parecer algo contundentemente prudente y sabio 

A través del humor y de los cuentos, en Masonería se nos lleva a percibir el carácter paradójico de la vida y nos desvela nuestra forma de pensar condicionada. Los cuentos, precisamente contienen elementos incongruentes y de  humor, que hacen se escape  de los rígidos patrones mentales impuestos a la humanidad por el hábito y conducen la conciencia un poco más adelante en el camino de una verdadera comprensión, revelándonos una sabiduría viva que se desdobla en varios niveles de interpretación, y todo con el fin de llevarnos a estados superiores de consciencia .

Y le advierto , tenga cuidado , usted seguramente es víctima de condicionamientos adquiridos en Universidades o escuelas de educación Básica , que le han provocado ver la realidad de forma deformada; ejemplos de esto hay muchísimos. Pero pierda cuidado, ahora está por medio de un saber milenario permanente hoy en la masonería encaminado a liberarse, de este terrible condicionamiento; y será liberado.

Este Saber liberador oculto en la masonería, permanece puro y sin mancha,  este saber libertario atravesó fronteras y se enraizó en varias culturas, persistiendo a través de los siglos y siglos. Nadie sabe con certeza quién  lo formuló por primera vez  y dónde  surgió , seguro alguien al estar construyendo alguna pirámide en Egipto dio que el ser humano podría ser liberado - El misterio que rodea a este primer librepensador  es, en realidad, la forma más apropiada de presentar a un personaje que sólo puede ser descrito, resaltando sólo lo que es realmente importante, es decir, su mensaje que perdura a través de los siglos . Un mensaje liberador que nos enseña a reírnos de nosotros mismos, como una de las formas de auto conocernos. Seguro nos podemos imaginar a este primer librepensador en medio de la construcción de una pirámide que se echó a reír, y les contó a sus compañeros su idea y también se echaron a reír.   Un menaje que nos hace percibir la paradoja risible  de nuestra situación humana y que nos habla de otra posibilidad de consiente para el ser humano.

Familiarizarse con la alegría nos abre la posibilidad de entrar en contacto con la capa más profunda de la Masonería y claro en uno de sus aspectos más desconcertantes. Pues créame el secreto masónico esta encubierto en un cuento, que se nos cuenta en varias etapas y este cuento es  al que llamamos vida, y si no reímos de la vida y con la vida , nos convertiremos en unos amargados y la masonería no fue pensada para gente amargada con la vida. 

Alcoseri