Iniciaciones antiguas y modernas
El método iniciático es propio de
prácticamente todas las disciplinas
espirituales y no exclusivo de la Masonería, aunque la Masonería le daría un toque más refinado y profundo. Así que todas las religiones
tienen su forma de iniciaciones: el bautismo, la comunión, el Bar Mitzvá judío,
La Shahada islámica, y tantos ritos de purificación, viajes simbólicos, etc.
Todas estas prácticas no son más que fórmulas rituales diversas que pretenden
abrir la puerta de la mente del iniciado a los contenidos sutiles de la enseñanza
que él recibirá, o mejor dicho que están ya contenidos en el Alma Humana, y que
están listos a activarse por medio de rituales de iniciación, así los
gnósticos, los rosacruces , y tantos
otros sistemas esotéricos.
Y cualquiera que sea la forma de iniciación,
que contiene elementos que son comunes a todas las religiones, sectas y
organizaciones esotéricas como la Masonería lo es, ya que proceden de la misma
fuente y tienen un propósito similar, que es para impresionar al espíritu y
despertar el potencial por de la práctica, la preparación -o para ser el
receptor de una creencia que se fundamenta en su sensibilidad, más que en la
razón. Así debemos comprender que , una creencia que necesita ser comprendida,
no es creencia, sino filosofía, y la fe religiosa no necesita ser comprendida,
sino aceptada “Per se”.
Todas las antiguas iniciaciones
comenzaban con una muerte ritual, que ponía
alegóricamente fin a una vida
mundana que se mantenía en la oscuridad
total, de modo que pudiera renacer como la semilla enterrada bajo tierra, y esta semilla estimulada por el Sol germinaría ,
así el iniciado estaría ya listo para empezar a caminar hacia la luz. Porque
esa era la idea, extraída de la observación de la naturaleza, que los antiguos
maestros del conocimiento arcano hacían del proceso que daría el origen a la
vida de un ser humano nuevo: una semilla se coloca en el útero de la tierra,
como si fuera un cuerpo puesto en sepultura; allí es regenerada por los
nutrientes de la tierra y la acción del calor del sol; esta idea del renacer que
se ha convertido en una de las más antiguas del mundo. Así, brotar significa
salir a la luz, revivir. El hombre nuevo, renovado, renacido en función de la
nueva creencia, es un Lázaro resucitado de las tinieblas, que vence la muerte
psíquica, reencarnando o resucitando, para una nueva vida.
Según antiguas tradiciones, la
práctica de la iniciación comenzó en eras anteriores a Egipto , Caldea, Grecia
, la India , comenzó en la era en que los seres humanos Vivian en las Cavernas,
haya en la era paleolítica hace unos 200 000 años. Sucedió hace unos 5000 años
que cuando la degeneración humana comenzó, los sabios de aquellos pueblos
resolvieron ocultar del vulgo los grandes secretos que hicieron el esplendor de
civilizaciones ahora olvidadas y sólo
serían comunicados estos secretos a pocos escogidos, que se mostraron dignos de
compartirlos. Los grandes héroes de los mitos vedantas, griegos, babilónicos y
otros, fueron algunos de ellos elegidos. Después los Misterios de la Iniciación
fueron recompilados por los Sumerios, por
los Hierofantes de aquella época e incorporados a la tradición de varios
pueblos, entre los cuales los hindúes, los egipcios, los asirios y otros pueblos antiguos. Aunque en fechas
recientes se ha descubierto una civilización aún más antigua que la Sumeria en Turquía
me refiero a Göbekli Tepe de aproximadamente 11, 500 años atrás; Göbekli Tepe
es un templo tiene obvias trazas de arquitectura iniciática, incluso tiene dos
claras columnas.
En los tiempos prehistóricos, en la
iniciación no admitía ningún dogma y no tenía ninguna relación con la
escatología. Sin embargo, fue la verdadera religión de esas personas, a saber,
una disciplina metafísica y religiosa, al mismo tiempo, en el que solicitó a
reproducir los procesos naturales mediante el cual la deidad se manifiesta en
el mundo de la materia física. Era una imitación de la actividad de la
Naturaleza en la producción de los acontecimientos como la fecundación, la
siembra y la cosecha, la vida y la muerte.
Con el paso de los tiempos, la
práctica de los Misterios dejó de ser sólo una manifestación de religiosidad
arcana y se idealizó , invadiendo el territorio de la cultura, del gobierno y
del propio sistema educativo. Es así que vamos a encontrar en el antiguo
Egipto, entre los pueblos de Mesopotamia y la India de los brahmanes, y luego
en la Grecia clásica, Los Misterios funcionando como escuela, donde se enseñaba
ciencias, artes, ética, derecho, medicina, filantropía, justicia y
principalmente respeto por la gran Madre Naturaleza. Los templos a los dioses
que presidían estos Misterios pasaron a funcionar como verdaderas universidades
donde el saber acumulado por esas sociedades era desarrollado y preservado,
luego de un tiempo estos templos fueron
en ocasiones los centros del poder político de esos pueblos.
Todo cuanto de bueno, noble y
verdadero hay en la naturaleza humana, sea en términos de virtudes éticas y
morales, sea como aspiraciones divinas, eso era cultivado por las antiguas
sociedades iniciáticas en sus Misterios. De ahí el hecho de que esas antiguas
prácticas, que al principio eran esencialmente religiosas, se convirtieran en
verdaderas instituciones del saber practico, centros del saber venerados por
los pueblos y consagrados por los estados donde se practicaban.
Y desde siempre los centros del culto
al saber , se convertirían en centros de la ciega fe religiosa, y
posteriormente en centros del poder tiránico; para luego aparecer fuerzas libertarias para resolverlo todo , derrocando a los tiranos , y de nuevo comenzar ese ciclo sin fin, de libertarios
, clérigos corruptos y tiranos.
Alcoseri