Siguiendo el reglamento de la Logia
Un francmasón encontró un anillo masónico
muy valioso en Pasos Perdidos. Y estaba ansioso por quedárselo, pero debía actuar de acuerdo con el reglamento interno de
su logia , como también no sentir remordimientos de consciencia, sobre todo
si luego se lo veían puesto no se lo
reclamaran, por lo que urdió un plan : el
reglamento de la logia decía que quien encontrará un objeto perdido irá a la
oficina de la Gran Maestría a decir que había encontrado un objeto.
A esto el francmasón esperó pacientemente a que nadie estuviera en la Oficina,
como lo marcaba el reglamento fue junto a dos masones testigos cómplices
de él , y dijo:
"Encontré este anillo. "
Como el Hermano francmasón tenía una
voz fuerte aunque no muy clara, inmediatamente fue escuchado, y acuden a la
oficina varios masones .
"¿Qué está pasando te escuchamos
pero no te entendimos claramente, Hermano?
- El reglamento impone que venga y declare
un hecho ante la gran Maestría una sola vez, si
nadie me escucho claramente no es culpa mía. Hasta donde yo sé, repetir
lo mismo
otra vez no lo impone el reglamento de nuestra Logia. Pero lo tanto les diré
algo más: de hecho soy ya el dueño de este anillo masónico de diamantes que encontré en pasos Perdidos.
" -
Seguro , quien ya está habituado a
leerme entiende que los cuentos que relato tienen varios significados y repletos
de mensajes subliminales, mensajes que
se hunden en lo más profundo de sus psiques, sean ustedes masones o no lo sean.
En este caso en concreto , el Anillo
masónico de este cuento representa el conocimiento masónico, pero no cualquier
tipo de conocimiento sino un conocimiento muy valioso, pero este conocimiento
como se habrán dado cuenta no lo encontró dentro de una Logia, sorprendentemente
lo encontró fuera de Logia , en pasos perdidos que es la ante sala de un templo
masónico , de una Logia. En este cuento el francmasón quiere hacer suyo este
conocimiento superior, sabe que no es suyo, quizá lo encontró en algún foro de
la Internet masónica, quizá lo encontró en una introspección. Pero Nuestro
Francmasón del Cuento sabe tiene que cumplir con un Orden preestablecido , y
sabe que sus hermanos masones con sus
actitudes, hechos y palabras notaran que sabe algo más que el resto, pero él
sabe tiene que hacer legitimo el portar este conocimiento.
Debemos entender que este
Conocimiento Masónico , es real, muy concreto, este no se obtendría en una
Universidad mediante el Método Científico, o en una Iglesia, ni se obtendría
por herencia familiar ni de ningún modo ordinario; como les explicaba este conocimiento
masónico o mejor dicho este Algo Masónico , es más real y concreto que lo que
vemos y tocamos en el plano físico. De
hecho en concreto en Historias Masónicas reales se relata este hecho concreto; por ejemplo unos años antes de la Independencia de los
Estados Unidos, Benjamin Franklin se encontraba en Inglaterra donde conoció el
Hellfire Club. Este un lugar era
enigmático porque aquí se reunían los Iluminati de Adam Weishaupt. El héroe
estadounidense conoció ahí al barón Le
Despencer y de él recibió gran parte de su pensamiento político. Otro grupo de
Masones van a Egipto y ahí reciben de una sufíes una reliquia con contenía supuestamente la
Baraka del Santo Profeta Mohammed y forman los Shriners. Otros contactan con
algún masón misterioso y forman alguna sociedad
académica, algún Club o una Benemérita Instrucción, algún partido político, o
trasforman a un don nadie en un gran líder político.
Pero , regresando al Cuento , no suelo dar explicaciones a los
cuentos que relató, pero en esta ocasión creí pertinente el hacerlo
ALCOSERI