Política y Masonería
Algo que llama la atención a Masones
y No Masones , es la gran cantidad de personajes de la política que han pasado
por la Masonería, o mejor dicho se han formado en Masonería, personajes de gran
talla como los Masones Benito Juárez,
George Washington, Giuseppe Mazzini,
José Martí, Simón Bolívar solamente por citar algunos, y luego de esto, se sostenga que en Masonería
no se argumenta el tema político, no imaginamos a ninguno de ellos guardándose
en logia de no tocar el tema político.
Me centraré en este comunicado
esencialmente en un tema: la política en masonería que, más que otros temas,
implica e impone un enfoque cauteloso y profundo sobre la necesidad de
diferenciar entre el compromiso político y el masónico, y donde separar y en
donde justamente abordar o vincular a ambas. Esta Idea, sin embargo, sólo puede
representar un llamado a la reflexión.
Donde debemos separar a la Masonería
de la Política es que la Masonería jamás será considerado un partido político,
pero si el precursor de la gran mayoría
estos; en Logias masónicas jamás se hará ni proselitismo político ni
proselitismo religioso. Otro punto es
que los masones a nombre de la Masonería apoyen a un candidato. Otro punto es
que la Masonería no deberá ser considerada preferente a una línea política en
particular , ni de derechas, ni de
izquierdas ni de centro, ni pro-monárquica, ni anarquista, ni sinarquista , y mucho menos
de alguna corriente política funcional a alguna religión. A la
Masonería se le ha vinculado con la política liberal, pero entiéndase esta como
una política neutral, punto central donde convergerían todos los masones en
Logia , todo por el bien de la Humanidad y su progreso, pero el liberalismo masónico
en este caso es más una ideología más filosófica que política.
Como podemos ver claramente dentro de
logia hay una política, entiéndase política
como una Ciencia que trata del
cómo gobernar y cómo organizarse
en sociedad, especialmente de los estados , instituciones y grupos humanos, y la
masonería es un grupo humano, todo con la finalidad de un desarrollo armónico
dentro de Logias, en Logia se nos otorgan una serie de Herramientas y
directrices que, que al hacer uso de
ellas nos orientan a la sana convivencia, que pueden ser tanto utilizados para
nuestro crecimiento Masónico y Profano. Muchos consideran a las Logias
masónicas como unos Micro – Estados, con gobiernos autónomos , determinadas por
directrices políticas, y que estos fueron y son los modelos de los que se
tomaron para crear las Naciones que hoy conocemos, por lo tanto cada logia es un laboratorio político.
Tantos serían los temas que podrían
desarrollarse en una Logia como el masón en lo personal guste, siempre llevándose con respeto, el
respeto es el instrumento que usaría la Masonería llevar las cosas en Paz, la
Masonería por tanto tratando de diferenciarse del uso en la vida profana usa causes más
míticos, por lo tanto usa rituales y formulaciones un tanto o un mucho más
sublimes, por ello cuando se trata un tema político en logia se trata de llevar
a estos niveles se solemnidad profunda, pero debo admitirlo que en algún momento
cuando se toca un tema político o religioso durante la sesión
masónica tenida se puede evitar se
acaloren las cosas, y haya frontales choques ideológicos, y es como si esto de la política
o la religión estuviera enraizado en alguna capa cerebral primitiva , en la
región “R” de Reptil ,o Reptiliana . La
importancia del razonamiento en tales puntos es una oportunidad que el
Francmasón se auto –observe a la vez que observe y analice a los demás.
Habiéndonos así en Logia dado
herramientas de trabajo que, además de tener un importante valor simbólico en
nuestro recorrido masónico y una cierta conexión con la vida cotidiana, no
pueden dejar indiferente al masón, que debe hacerse la pregunta sobre las
relaciones y diferencias entre el trabajo masónico y la vida profana. Dado que
las distinciones precisas y determinantes deben descartarse a priori, en
cualquier caso debemos preguntarnos cuáles son los límites que dividen estos
dos aspectos que impregnan la vida de cada uno de nosotros; aspectos tan
profundamente diferentes pero tan íntimamente conectados. Hoy vemos a muchos hábiles
personajes de la política y de los medios de comunicación, manejando a su
antojo a las masas , y sacando con ello las mejores tajadas del pastel, sin importarles
el bienestar humano en lo más mínimo. Y es cuando los masones debemos oportunamente
salir a la escena a advertirle al pueblo de los enormes riesgos de que se
desborden los fanatismo políticos.
Recuerden que la Masonería es una de
las instituciones más antiguas del Mundo , y claro no se remonta sólo a 300
años y para tratar de dar una respuesta a esto, uno podría tomar prácticamente
cualquier aspecto del pensamiento masónico, ya que en Logia no nos limitamos a
valores teóricos de apoyo, sino que trabajamos para que, concretamente, la
humanidad entera pueda disfrutar de Libertades Reales. Uno podría preguntarse,
por ejemplo, sobre las conexiones o diferencias entre el concepto de Hermandad
Masónica y el de la fraternidad civil, sobre la Tolerancia Masónica y la
proclamada “entre comillas” “tolerancia religiosa” o sobre la igualdad Masónica
y los sistemas legales de un estado que codifica igualdad y paridad de
tratamiento entre ciudadanos. Confundir estos conceptos significaría
distorsionar la masonería de sus verdaderos fines. Ya que el Estado y la
Religión solamente se basan es supuestos; mientras que en Masonería las cosas
son Reales, como diría Gurdjieff “El Mundo es Real sólo cuando Yo Soy”
Lo Moral y lo político
Hoy 23 de Marzo hace unas horas
escribí en facebook
“Esa idea de que en masonería no se
hablara ni de Religión ni de Política, fue la jugada perfecta del Clero , y de
los Monarcas Europeos que usaron al religioso James Anderson allá por 1729 para
reglamentar a la Masonería, cuando se dieron cuenta del peligro que
representaba la masonería para sus intereses . Hoy está idea de que Los Masones
no traten ni de Política ni de Religión se sigue manteniendo para los mismos
efectos . La masonería siempre se mantiene infiltrada por clérigos y agentes
políticos, y una de sus consignas es aparte de espiarnos, es de seguir
manteniendo viva esa idea de que en masonería no se traten temas ni políticos
ni religiosos , todo con el único fin de que no se elaboren cambios en la
estructura política o religiosa . No quieren se gesten otros Simón Bolívar, ni
otros Juárez, ni más José Martí”
Como apuntaba ya en las
Constituciones de James Anderson había una prohibición expresa de hablar de
política en las Logias. Históricamente, rechazar la política, separarla de la
moralidad, buscar la virtud, significaba también para los masones y sobre todo
poder emitir un juicio y emitir un veredicto sobre el sistema político que, en
el momento del nacimiento de la francmasonería especulativa, era
predominantemente absolutista. En estas circunstancias, profesar ciertos
valores significaba, en consecuencia, presagiar una nueva forma de hacer
política. De ahí la preocupación en el frente masónico de mantener, en la
medida de lo posible, una separación de la moral religiosa alejada de la política. Tanto es así que la gran mayoría de los masones ya con décadas en Logia son
unánimes en afirmar que una de las razones para perseverar con el secreto
masónico fue también mantener la distinción entre moralidad religiosa bastante
alejada de la política mundana,
separando la actividad de la Logia del mundo exterior y pudiendo ejercer
libremente el juicio. Y respeto al mundo
de la política. La Experiencia nos
enseña que el secreto masónico no ha sido capaz de hacer al francmasón un ente alejado
de la política mundana.
En particular, durante el período de
la Ilustración hubo un estallido de la política en las Logias Masónicas,
teniendo en cuenta que los profundos cambios políticos y sociales, típicos de
aquellos tiempos, encontraron estímulo y aguaza en los valores masónicos, y
algo así se está notablemente gestando en este Siglo XXI. Este cambio histórico
particular podría, a primera vista, parecer coincidir con un período
floreciente y positivo para toda la Francmasonería. En realidad lo que advierto
viene, y con razón, para coincidir con un momento de profunda crisis Mundial, noto un
resurgimiento de nuevos hermanos masones más activos en la Orden Masónica, y tanto
igual en el plano político. Y esto debe hacernos reflexionar. En aquellos años,
el espacio masónico estaba cada vez más dominado por el discurso político y se
estaba convirtiendo tanto para los masones como para los observadores externos,
en el terreno privilegiado de la confrontación entre las diferentes fuerzas del
partido, lo mismo esta sucediendo hoy. Enfrentados con las inevitables
laceraciones internas y lo que esta
situación conllevaba en las Logias, los entonces Francmasones hicieron
preguntas sobre la naturaleza y el propósito real de la Masonería, exactamente
lo mismo pasa hoy. Luego del Periodo de la Ilustración más tarde, y con la
evolución del estado, que culminó con las revoluciones fruto de la Ilustración,
que condujeron a la formación de sociedades más
progresistas posteriores a la
Ilustración, el debate político se desplazó como siempre de las Logias a las
nuevas estructuras externas.
En los años revolucionarios, los
masones alrededor de año 1789 elaboraron Logias que habrían sido colmenas políticas esencialmente
impulsoras de los necesarios cambios, sin tener, sin embargo, un reflejo o
impacto inmediato en la vida
institucional y, cuando se notó el acercamiento a la revolución, la
transferencia neta del debate políticos fuera de las Logias en las que
permanecieron sólo aquellos que debieron seguir trabajando para la defensa y
preservación de la verdadera Masonería vinculada a la Tradición Esotérica.
Todo en el Universo en Cíclico, lo
mismo las sociedades , lo mismo las Logias, y este periodo revolucionario
claramente se está gestando en Latinoamérica.
Este comunicado masónico algo extenso
, espero que no sea una digresión histórica excesivamente aburrida, pero sirve para decir que puede considerarse
no incorrecto, pero ciertamente reductivo, pensar que la prohibición de hablar
sobre política en la Logia está dictada no es únicamente por la necesidad de evitar posibles
enfrentamientos de opinión, eso ya lo deje claro párrafos arriba. Razonar sobre
esta prohibición en particular significa, para el masón, comprender la necesidad
de investigar y cuestionar la diferenciación entre la masonería esotérica y la masonería
exotérica (política), en las tareas que el francmasón debe realizar en la logia
frente a su eventual compromiso civil y político externo. El peligro de
confusión y superposición, debido a la distinción insuficientemente ponderada
entre la masonería y la política, es concreto e importante. Concretamente, si
consideramos las diversas reglamentaciones y estatutos que rigen a nuestra
Orden y que a menudo se refieren a conceptos tales como la patria, la bandera,
el himno nacional, las leyes que la rigen, la lealtad al estado, etc algo que
vemos mucho en Logias, bueno al menos en
logias mexicanas, de las logias de otras naciones debo admitir ignoro sus usos
y costumbres, pero creo esto de vincular
a la Masonería Mexicana con la Lealtad a la Patria es un factor que ha
provocado que la masonería mexicana este tan politizada . Es importante
destacar que una mala interpretación de lo que es la masonería , o peor aún, de
una combinación inadecuada de conceptos, dificultaría la comprensión de los
propósitos y propósitos de la masonería. Una pregunta adicional surge. ¿Qué
sentido tiene hoy la prohibición del debate político en Logia ante la evolución
histórica de nuestra sociedad y el logro de un estado secular en el que existe
una separación de poderes, los derechos de igualdad personal, la libertad de
culto, etc.? ¿Cómo debe leerse y entenderse el compromiso político del Mason?
El Masón ha asumido principios democráticos, los ha aceptado, y los defiende.
Pero esto no significa en absoluto que la francmasonería se pueda comparar con la
Política mundana. La masonería no tiene nada que ver con la organización
política o civil de un estado, cualquiera que sea, ni siquiera si el estado
está gobernado por instituciones democráticas que son similares a nuestros
valores. La naturaleza de la Francmasonería es, y debe permanecer esotérica , mixtica
, diáfana, inmaculada, pura y sin mancha, pero tampoco la masonería debe
convertirse en un monasterio con gente enclaustrada a 4 paredes y alejada del
mundo exterior , la masonería es una
Sociedad Iniciadora de Ideas. Precisamente por esta razón, la Francmasonería,
como tal, no puede y no debe proponer ninguno de esos objetivos a los cuales
cualquier asociación activa está dedicada a la sociedad secular que logra
objetivos políticos o, peor aún, partidistas. Pero, no por todo lo anterior el
libre análisis del tema político es
logia debe de prohibirse, es más debe de considerarse necesario, claro como
cualquier otro análisis se promueva en Logias, como el tema Científico, el Artístico,
el Esotérico, el Religioso , el Económico etc.
El objetivo de la Masonería es
trabajar por el Bien de la Humanidad. De lo contrario, sería tan vano y vacío
que la mujer virtuosa, el hombre virtuoso lo rechazarían en lugar de adherirse
a él. El objetivo es lograr el bien universal, desvinculado de las culturas
unilaterales, buscando la dimensión universal del ser humano, rompiendo con los
conceptos dogmáticos, buscando la unión de todas las fuentes de la intuición
del hombre, de manera transversal. Esto y ningún otro debe ser el propósito de
la Francmasonería. Pero esta finalidad, el bien universal, es tan vasta que
también se puede lograr en muchos otros caminos; entre ellos el bullicio entre
los hombres, el interés en los asuntos públicos y, entre muchos, incluso la
política.
La necesidad de mantener una clara
separación entre la masonería y la política mundanal se deriva de la diferencia
en el propósito. Para el francmasón, y en sus ojos, todas las leyes y
ordenanzas de su Estado, la realidad en la que vive y su cultura, siempre deben
referirse a toda la raza humana y solo por esta razón tienen un valor y un
significado para él. La Patria puede entenderse como la patria de toda la
humanidad, o al menos como una parte de la humanidad. Lo mismo se aplica a la
familia cuyo concepto debe ser elevado y entendido como un concepto universal.
Para el Masón ya con años en Logia la masonería , se convierte, en virtud de su
pensamiento universal y solemne. Su cosmopolitismo se manifestará a través de
la actividad más poderosa, incluida la política, que, sin embargo, siempre debe
distinguirse del camino iniciático que sigue. El francmasón sabe que las leyes
y las constituciones, aunque limitadas, son mejores que nada. La Francmasonería
es universal, profesa valores universales que, como hemos visto, no coinciden
en particular con un partido político, sesgados por definición, ciertamente útiles
y necesarios, pero ciertamente diferentes de lo que debe ser la Francmasonería.
Esto tiene la consecuencia de que no hay diferenciación entre los francmasones
activos en política y los masones que no lo son, que pueden encontrar un lugar
en los discursos de Logia. Es necesario garantizar que las referencias directas
a cuestiones políticas no menoscaben el trabajo de Logia. Si lo desea, también
podría extender el mismo razonamiento a la religión, pero no entraré en el tema
por la delicadeza y complejidad del tema, lo dejare para otro comunicado. El
hecho es que nuestra cultura y nuestra forma de pensar son casi antitéticas a
una visión universal de la vida y del hombre, que es, por el contrario, típica
de la masonería.
La elección del debate en Logia sobre
la religión y la política deben considerase como áreas meramente cognitivas, pero sobre
las cuales uno no puede tomar posición, de cualquier modo debe ser lo menos aventurado.
Por lo tanto, estas prohibiciones y su respeto deben meditarse, razonarse y
entenderse, y no reducirse ni modificarse a voluntad. La política es el
diálogo, pero sobre todo la búsqueda del consenso, respetando las opiniones de
los demás, en una decisión, en una resolución, en una idea que incluso las
minorías deben respetar según los principios democráticos asumidos.
Como se dijo, por esta razón la
Francmasonería ha asumido los principios democráticos, pero también ha decidido
militar en una Orden que no tiene nada en común con la organización política. Y
cada masón debe tomarlo en cuenta en los discursos y posiciones que tomará en
la Logia, siempre teniendo en cuenta la respuesta que dio cuando le preguntaron
si pensaba que era un hombre libre.
Nunca debemos olvidar cuáles son las
piedras angulares destinadas al edificio masónico, la trascendencia e introspección,
el refinamiento espiritual del hombre que esperamos lograr. »En mi opinión, la
conciencia de tener que reanudar, reevaluar y razonar sobre estos principios fundamentales
que son uno de los desafíos que la Francmasonería debe recoger en este siglo XXI porque representan el camino
hacia un conocimiento global y una visión cada vez más global de grandes ideas
del mundo. Porque el hombre, cuyo propósito es su aculturación y profundización
espiritual, puede volverse más libre y así proporcionar su contribución al
bienestar general.
El Francmasón Kipling ya había
entendido todo esto, en su famosa historia "El hombre que quería ser
rey", había abordo el riesgo de mezclar el poder de política mundana con el Gran Poder de la
Masonería , y de que la idea de una masonería al servicio del Estado era muy inadecuada , concluyendo con una advertencia a
todo masón de los riesgos terribles de mezclar política con Masonería. Pensemos
a esto en dos francmasones Benito Juárez
y George Washington , hombres de política y de masonería , y nos preguntamos
cómo lograron mezclar ambas cosas , hay varios puntos, número uno era una época
y una razón muy específica , número dos eran masones de un nivel de consciencia
superior , o número tres , supieron separar hábilmente el mundo masónico del
mundo político.
En nuestra realidad, la advertencia
del Francmasón Kipling debe ser recogida en el sentido de distinguir clara y
firmemente el trabajo masónico del compromiso político, al mismo tiempo que
respalda con igual claridad y firmeza que los conceptos no son totalmente excluyentes, obviamente están
conectados, pero deben distinguirse y no deben confundirse. Un francmasón que
hace política usará las herramientas que le ha dado la democracia y le dará un
buen uso a lo que es la enseñanza masónica, pero el compromiso en política no
debe entenderse perfectamente.
Debo concluir este comunicado
masónico con que siempre debemos tener en cuenta que, que la dualidad que distingue nuestra vida y
que encuentra simbólicamente expresado en las dos columnas en umbral del
Templo, brinda al francmasón la oportunidad de superar este dualismo profano,
siguiendo el ajedrezado camino medio de la vida, manteniendo tanto como sea
posible nuestra mirada fija en una Meta
superior representada en el Oriente del Templo.
Alcoseri