¿Es Lucifer un mero símbolo o es un ente
concreto?
A Lucifer se la asocia con la
Serpiente del Edén , Lucifer el Tentador , Lucifer una serpiente de fuego
procedente de los abismos , esto asocia a Lucifer con el Infierno , una
personificación de esa fuerza ígnea , se vincula con la Libido , y con la
astucia también , que resulta ser el agente causante de la trasmutación de la
Consciencia al despertar a Adán y a Eva, esto si se canaliza de modo apropiado.
Todo esto nos guía inevitablemente a
vincular a Lucifer con la Kundalini , la serpiente de fuego que hipotéticamente
según el Tantra Hindú se localiza en la base de la Columna vertebral humana, y
con ese proceso de despertarla para obtener la iluminación. Bien, por todo el
mundo a la serpiente se le vincula con esa divinidad localizada dentro de
nosotros los seres humanos, o bien se le
asocia a la serpiente con alguna
divinidad Tal como Quetzalcóatl, o esos dioses reptilianos o en forma de
serpientes humanos que se han mencionado tanto. No parece casual que por todo el mundo y en
todas las épocas esto de las serpientes parlantes o dioses serpientes se
mencionen con tanta insistencia o se representen
tan frecuentemente artísticamente.
La respuesta a que la serpiente se
vincule con todo esto puede ser de lo más sencillo de explicar , y es que el
ser humano tiene arquetipos simbólicos que se dieron en forma de un tipo de
contrato o acuerdo en la psique profunda , en el inconsciente colectivo humano
, y en algún momento de la más remota antigüedad se llegó al acuerdo de asociar a la serpiente con la Libido , con
la inteligencia inferior , la astucia , la tentación , con el diablo y con todo con lo que hoy se
asocia , así igual pasó con otros símbolos
con los que inmediatamente el ser humano asocia con algún arquetipo ya
prefijado; y estos son trasmitidos de forma genética a las nuevas generaciones
y reforzado por la literatura, la religión , la ciencia etc. así vemos que se
usa el caduceo con la serpiente en la ciencia para asociarlo a la medicina. Y
así podemos llegar incluso al número 33 y
asociarlo a algo así como a un logro a una meta, y esto del número 33 sin duda
fue un acuerdo fijado hace miles de años , antes de Cristo ,y Cristo lo retomó
con su 33 años de vida , y luego posteriormente la masonería lo vuelve a
retomar con los 33 grados de la masonería del rito escoces. Debemos entender
que estos símbolos son sólo para comunicar ideas, pero no para trasmitir lo concreto o real.
Pero a final de cuentas resultará,
que ni la serpiente , ni el número 33 , ni ningún otro número, letra , palabra ,
animal o símbolo representarán algo , que no sea una representación simbólica en
nuestra mente personal o colectiva, pero más allá de eso no hay nada. Lucifer es parte de lo mismo , es una
mera representación arquetípica simbólica, y
nada más; no es real , no tiene sustancia en lo concreto. Pero ,
todo esto nos invita a ir más allá de los meros símbolos y contactar con el
Gran Todo de manera directa , y sin intermediación de representaciones simbólicas.
Alcoseri