¿Masones Libres y de Buenas Costumbres Morales? #1
Se menciona que al Camino Masónico sólo pueden acceder aquellas personas que ha llegado a ser: " Libres y de buenas costumbres "...
Ser " Libres y de buenas costumbres " es algo relativamente subjetivo, indefinido , la libertad es un punto debatible , recordemos que la Masonería en tiempos pretéritos se refería a que los que se fueran a iniciar masones no fueran esclavos , y lo de buenas costumbres , igual es algo demasiado relativo en este siglo XXI , ya vemos en todo esto de las nuevas agendas sociales de igualdad y diversidad , como la 2030 adoptadas por la ONU.
Vamos a hondar en quienes serían las personas idóneas u óptimas para ser iniciados como masones , podrían ser aquellas Personas que ya han llegado a poner sus propias cosas en orden..., tanto en su mundo interior como el exterior... que tienen control sobre sus exabruptos internos, no explotan y no se pierden en su ego lleno de orgullos y vanidades falsos..., y también serían personas que cumplen con sus responsabilidades de familia, de trabajo y socialmente, una persona no puede ser iniciado como masón si no cumple con los deberes familiares de sostenimiento económico y de sustento ético y moral...
En este punto , podríamos pensar que a la masonería ingresarían personas que ya han pulido sus piedras en bruto , o que las han llegado a trabajar hasta un punto , que no les sería difícil encajar en el edificio moral de la institución masónica. Esto es una persona que calificaría como una verdadera piedra en bruto , no sería óptima para la iniciación , ni tan siquiera seria requerida para iniciarla .
De todo esto parte el lema masónico de : “Tomamos buenas personas para convertirlas en mejores”
Siempre hay algo en nuestro interior que nos invita a superarnos, a pesar de una vida tan bien cumplida, a otra mejor..., y eso es lo que le conduce al Trabajo Masónico de perfeccionarnos.
Existe mucha confusión con respecto al “camino a seguir en masonería ”. Los caminos masónicos no inician en el nivel ordinario profano en que nos encontramos, están mucho más arriba. Se confunde uno al creer que porque ya entró en una determinada Logia , está en el camino masónico ; y no es así. Todas las Logias Masónicas pertenecen a la fase preliminar de limpieza y purificación, y no propiamente al camino masónico mismo. Los verdaderos caminos masónicos tienen que ver con lo nuevo y creativo, y no con lo actual y conocido; apuntan hacia otra dirección muy diferente, no incluida en nuestro bagaje en el que nos desenvolvemos en la vida profana . Esas Logias están a nivel preparatorio existen entre lo actual y el camino posible, digamos que son una especie de escalera. Cuando llegamos a iniciarnos en el grado de aprendiz estamos precisamente en el primer escalón, y cuando finalicemos la etapa preparatoria, que coincide precisamente con el último escalón que es el de la Maestría Masónica , ahí es donde da inicio el verdadero Camino. Hay que trabajar mucho en esos niveles para poder ascender y entrar al verdadero Camino Masónico ; muy pocos masones lo logran.
¿Decir un Mason de Buenas Costumbres , nos habla de Moralidad?
Hay pocos textos masónicos donde no se invoca la moralidad . Moralidad basada en la diferencia entre El vicio y la virtud, entre el bien y el mal, la conciencia y el deber, etc… Tantas referencias morales que jalonan rituales y textos. ¿Pero qué moralidad es? ¿La de las Constituciones de Anderson de 1723? ¿La moralidad que animaba a ciertos hermanos Liberales a hacer la guerra a los hermanos masones conservadores ? ¿La Moralidad Masónica qué trata? Encontrar puntos en común es difícil, encontrar originalidad aún más...
En Logias podemos escuchar así por años frases como : “La masonería tiene como objetivo la mejora moral de la humanidad. » « Sus miembros buscan, ante todo, lograr en la tierra y para todos los humanos el máximo de desarrollo moral, intelectual y espiritual, condición primera de la felicidad ». "La masonería, institución esencialmente filantrópica, filosófica y progresista, tiene por objeto la búsqueda de la verdad, el estudio de la moral y la práctica de la solidaridad. »
¿Pero qué moralidad es la Masónica ? ¿Podemos decir que la "moralidad sublime del divino maestro Jesucristo , la moralidad común dictada por la Organización de las Naciones Unidas " es del mismo orden que "el estudio de la moralidad dictada por nuestras madres "? ¿Cuál es la “verdadera moralidad” de cuyo “tesoro” se jactan ciertos rituales, y que nos dice que basta ser “de buenas costumbres”, como exigen las Constituciones de Anderson , para encarnarla? es la moraleja repetida " construir posos sin suelo a los vicios y elevar templos a la virtud"? ¿Es “la energía moral sin la cual el ser humano no puede superar o vencer las dificultades que experimenta”, es lo que permite “mejorar tanto al ser humano como a la sociedad ?¿Es la Cartilla moral de Alfonso Reyes que inspiró la Guía ética de López Obrador?
De hecho, la primera cuestión no es tanto la de la definición de una moral masónica como la de su existencia misma. ¿Podemos argumentar que existe una moral masónica?
Aún cuando en los tiempos antiguos los masones estaban obligados a practicar la religión que se observaba en los países donde habitaban, hoy se ha creído más oportuno, no imponerle otra religión que aquella en que todos los hombres están de acuerdo, y dejarles completa libertad respecto a sus opiniones personales. Esta religión consiste en ser hombre buenos y leales, es decir, hombres de honor y de probidad, cualquiera que sea la diferencia de sus nombres o de sus convicciones”(Constituciones de Anderson 1723)... “deben evitarse en absoluto las discusiones sobre religión y política, sobre nacionalidad, puesto que los masones, como antes hemos dicho, no profesan otra religión que la universal, y que pertenecen a todos los pueblos, a todas las lenguas, y son enemigos de toda empresa contra el gobierno constituido; la falta de observancia de éstos preceptos, ha sido y serán siempre funestos para la prosperidad de las Logias” (Constituciones de Anderson 1723).
Reuniendo ¿A que entendemos por "hombres buenos y leales u hombres de honor y probidad, cualesquiera que sean las denominaciones o creencias que los distingan?", las Constituciones Anderson de 1723 fijaron el fin y los medios de una utopía de armonía universal mediante el ejercicio del bien
La masonería, que, por conveniencia, se llama "andersoniana", acusa recibo del modelo en el que se inspira: el de los círculos intelectuales frecuentados por sus fundadores y, en primer lugar, por Jean-Théophile Desaguliers, cabeza pensante de " la 'Operación Gran Logia de Londres '. La Royal Society , grupo de expertos antes de tiempo, es un laboratorio de ideas, estudio, investigación experimental y también especulaciones científicas, metafísicas y alquímicas. Hay, a decir verdad, poca cuestión de moral, excepto como posible elemento de reflexión sobre la organización política; porque, precisamente, la moral no es una ciencia especulativa. Su propósito no es explicar qué son las cosas, sino establecer un código de leyes vinculantes para las actividades individuales.
No se trata sólo de una nueva sociedad culta que instituyeron los masones fundadores, sino de un espacio inédito: el de una fraternidad iniciática que reúne a “hombres buenos y leales u hombres de honor y probidad, cualesquiera que sean las denominaciones o creencias que puedan distinguirlos (…). Así, la Masonería se convertiría en el Centro de unión y el medio para establecer una verdadera amistad entre personas de diferentes razas , diferentes creencias religiosas y diferentes tendencias políticas que deberían haber permanecido perpetuamente distantes.
Así se fijaron el fin y los medios de una utopía de armonía universal a través del ejercicio del Bien. En países divididos y debilitados , asolados por guerras religiosas y luchas dinásticas, esta apuesta por la reconciliación y la armonía, arraigada en el choque de los opuestos, fue cuanto menos atrevida.
Sin embargo el surgimiento de la Masonería era políticamente necesario , ¿la sociedad no estaba ya en sintonía con los tiempos? Llama la atención que, cuatro años después de la fundación de la Gran Logia de Londres, aparecieran las Consideraciones sobre las causas de la grandeza de los romanos y su decadencia, de Montesquieu, donde se puede leer: “(…) una unión de la armonía, que hace que todas las partes, por opuestas que nos parezcan, contribuyan al bien general de la sociedad, como las disonancias en la música contribuyen a la armonía total. Puede haber unión en un estado en el que crees que solo ves problemas (…) Es como partes de este universo, eternamente unidas por la acción de unos y la reacción de otros. »
Esta concepción dinámica y dialéctica de la búsqueda del unísono también es sorprendentemente moderna. ¿No reconocemos allí “las oposiciones necesarias y fecundas” de algunos de nuestros rituales contemporáneos?
¿Cómo podemos pensar que las “buenas costumbres” masónicas puedan tener un único estandarte, independientemente de los siglos, países, culturas… y masones? Con la moral estamos en el registro del superyó social que Freud teorizará
Además de las cualidades morales individuales que las Constituciones establecen como prerrequisitos para participar en el proyecto masónico , además de la ayuda mutua corporativa y caritativa que constituyó la razón de ser esencial de las logias operativas y que se reafirma como fundamento moral de la masonería especulativa , es significativo que la organización escogida sea la de una obediencia – una “superestructura”, como diríamos hoy –, lo que implica claramente la necesidad de leyes compartidas, la primacía del bien común sobre el satisfacción individual y la noción del interés superior. Se detecta, en la apuesta de los masones fundadores por reunir y federar un grupo humano en torno a valores comunes, un intento de definir una moral colectiva.
Pero la moral colectiva no puede reducirse a "costumbres" que son sólo un aspecto externo de la vida moral, es decir, un conjunto de hábitos y costumbres, reglas de conducta relativas a la vida individual y social, que prevalecen en un momento dado y en un contexto dado . sociedad. La moralidad solo puede ser interna a la conciencia y más allá del aquí y ahora. A pesar de su etimología única: el griego ethos y el latín mores , moral, ética y mores no pueden confundirse
Alcoseri
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