LOS DERECHO HUMANOS Y LA MASONERIA

En el año de 1945, en la Segunda Guerra Mundial, el presidente de los Estados Unidos de América, Franklin D. Roosevelt utilizó el término “Naciones Unidas”, cuando 26 naciones aprobaron la “Declaración de las Naciones Unidas”, para combatir juntos contra las potencias del Eje.

La Organización de las Naciones Unidas (ONU), la cual se creó oficialmente el 24 de octubre de 1945, está formada por 192 países, que se reúnen regularmente para trabajar en contra de las pobrezas y la seguridad de los pueblos, así también para combatir la injusticia en que viven muchos países.

Un diez de diciembre de 1948, se reunieron en París, como la Asamblea General de la Organización de las Naciones Unidas para proclamar la Declaración de los Derechos Humanos.

Los ideales que llevaron a los liberales franceses a su revolución, fue el reinado criminal de los reyes franceses, y que los llevo a la promulgación por vez primera de los “Derechos del Hombre”, con su consigna: ¡¡¡LIBERTAD, IGUALDAD Y FRATERNIDAD!!!.

La masonería tiene esos principios bien definidos y sus miembros los respetan con fidelidad y lealtad a la Orden. Veamos algunos principios de esta organización comparándolos con los de nuestra Augusta Institución:

DECLARACIÓN DE PRINCIPIOS EN LA MASONERÍA

La Masonería es una Institución Filosófica, progresista, civilizadora y filantrópica.

Son sus principios: La Libertad, en todos los ordenes, la Igualdad y la Fraternidad.

Tiene por objeto la investigación de la verdad, el estudio moral, intelectual y social de la humanidad. No admite mas diferencia entre los hombres que la señalada por sus meritos intrínsecos.

DECLARACIÓN DE LOS DERECHOS HUMANOS

Articulo 1: “Todos los seres humanos nacen libres e iguales en dignidad y derechos y, dotados como están de razón y conciencia, deben comportarse fraternalmente los unos con los otros”.

Articulo 2:. “Toda persona tiene todos los derechos y libertades proclamados en esta Declaración, sin distinción alguna de raza, color, sexo, origen nacional o social, posición económica, nacimiento o cualquier otra condición. Además no se hará distinción alguna fundada en condición política, jurídica o internacional del país o territorio de cuya jurisdicción dependa una persona, tanto si se trata de un país independiente, como de un territorio bajo administración fiduciaria, no autónomo o sometido a cualquier otra limitación de soberanía”.

¿Qué nos ha pasado? Estamos dormidos, ¡¡¡despertemos!!!, hagamos conciencia de lo que esta pasando en nuestras logias, que cada quien interpreta los principios a su pobre imaginación, y ello es resultado de tanta confusión, en especial los jóvenes que vienen con sus mentes habidas de conocimiento y en poco tiempo o se hacen como ellos o se alejan tristes y con una idea equivocada de la masonería.

Luis Muñoz Lamoneda

Torreón, Coahuila, México, a 1 de mayo del 2012