Conjuro XCIII
PARA NAVEGAR HACIA EL ESTE EN EL MÁS ALLÁ
¡Oh potencia masculina de Ra generador!
En el tiempo en que se apagó la tempestad cósmica
la inercia del Mundo duró millones de años…
No obstante yo, yo he llegado a ser más poderoso que los poderosos,
más fuerte que los fuertes…
Pero si, contra mi voluntad fuese hecho prisionero y llevado hacia Oriente,
a través del pasaje temible de los dos Cuernos;
si los demonios me torturaran y se burlasen de mi Alma,
si devorasen el órgano creador de Ra,
también la cabeza de Osiris…
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Conjuro XCIII
PARA NAVEGAR HACIA EL ESTE EN EL MÁS ALLÁ
¡Oh potencia masculina de Ra generador!
En el tiempo en que se apagó la tempestad cósmica
la inercia del Mundo duró millones de años…
No obstante yo, yo he llegado a ser más poderoso que los poderosos,
más fuerte que los fuertes…
Pero si, contra mi voluntad fuese hecho prisionero y llevado hacia Oriente,
a través del pasaje temible de los dos Cuernos;
si los demonios me torturaran y se burlasen de mi Alma,
si devorasen el órgano creador de Ra,
también la cabeza de Osiris…
Pueda yo, por consiguiente, ser llevado hacia los Campos
donde las Formas mágicas siegan para los dioses…
¡Si por lo menos los Cuernos de Khepra no me rechazaran!
¡Si por lo menos no me volviese igual al pus
en el Ojo de Tum!
¡Que no sea atrapado por los demonios,
ni que éstos me lleven hacia el Oriente,
donde gozarían divirtiéndose a costa de mi Alma!
¡Que no me hagan mal!
¡Que no me maten!
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Conjuro CIX
PARA CONOCER LAS ALMAS DE OCCIDENTE
Salve, oh Portal del Cielo septentrional Yo te conozco:
en el país Kharu está tu parte meridional;
tu parte septentrional está compuesta por el canal Ersa,
allí por donde Ra entra en el Cielo
en su Barca guiada por los vientos.
He aquí que alzo las velas,
de pie sobre mi barca que sigue su curso sin detenerse…
Verdaderamente, yo conozco a los Espíritus que viven en las ramas
de los sicómoros de esmeraldas, adorno de los ríos
que pasan silenciosos…
He aquí que consiguen enderezar a Shu
en el Portal del Soberano del Oriente,
por allí es donde pasa, en su Barca, Ra.
Yo conozco, verdaderamente, los Campos de los Bienaventurados,
¡El Patrimonio de Ra!
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Conjuro CXXXI
PARA PERMANECER AL LADO DE RA
Yo soy Ra y mi radicación rodea la Noche.
Todo hombre que le sigue, sigue a Thoth y participa de la Vida eterna…
Será igual a Horus
que, adornado con una diadema, recorre la Noche.
Yo soy uno de esos Seres cuyos amigos fueron destruidos
por el Príncipe de los dioses, y mi corazón se alegra.
Recorro la ruta junto a Ra habiendo recibido su arma de hierro.
Es así que vengo hacia ti, ¡Oh Ra, mi Padre divino!
Llego con los rayos de Shu e invoco a la diosa poderosa.
Yo soy mi subsistencia al dios Hu.
A través de mi presencia aparto del camino de Ra al demonio Nebt.
Yo soy un Espíritu santificado. Llego hacia los confines extremos del Cielo
donde habita el Príncipe de los dioses.
Encontré a la poderosa diosa.
Yo reanimé tu valor,
para que mi Alma viva
por el poder y el terror de tu Nombre.
Porque cuando en el Cielo se escucha la voz de Ra;
¡El que aquí da las órdenes soy yo!…
¡Salve, oh gran divinidad en el Oriente del Cielo!
¡Permitidme ocupar un lugar en tu Barca!
¡Permitidme bajar hasta ella planeando
bajo las plumas de un Halcón divino
!¡Permitidme que pronuncie las palabras de mando!
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Estas son solamente algunas pocas alusiones de las muchas de las ideas del Eterno Oriente en el Libro Egipcio de los Muertos
Tratamos, por tanto, con dos aspectos del Oriente Eterno masónico : el exotérico, o «imagen y semejanza del hombre», que ve a los dioses envueltos en las nieblas del Oriente mismo, desde donde gobiernan a los fieles que habitan bajo, participando plenamente al mismo tiempo de los vicios y virtudes de pando plena el concepto interior o esotérico, que exige elucidación. Evidentemente, el Eterno Oriente no es un lugar de descanso, recuperación y reunión con los queridos hermanos masones , en donde uno recibe una palmada cariñosa en la espalda por haber sido un buen masón. Representa más bien el Eterno Oriente un estado del ser absorbido en él, al que puede regresar cada alma o espíritu individual de todas las regiones de la creación para ser él, una vez que ha redescubierto y desarrollado la fuerza divina que hay en su interior.
La mortalidad significa la muerte simplemente la muerte del cuerpo físico; la parte inmortal del ser humano no muere. Dicho de otro modo, se han elevado por encima del estado en que es necesario reencarnar se en la materia para aprender y experimentar.