Dormidos los relojes
Me impregnaba con ella de la vida,
abismado en su fondo convulsivo.
El tiempo, tan trivial, tan fugitivo,
devino consistencia estremecida.
Dormidos los relojes, consumida
la hora final, el ímpetu festivo
cobrá carácter de oleaje vivo,
marea azul de eternidad vestida.
En nuestro radical vocabulario,
perdiá significado el arbitrario
sentido de orfandad, adiós, mañana.
Aquel intenso, inagotable instante,
sin umbral, sin ocaso, era el semblante
de nuestra propia infinitud humana.
Los Angeles, 3 de octubre de 2011
Francisco Alvarez Hidalgo.
**********************************************************
Buenos dias y ya la verdad bastante frios, normal pues estamos muy
metidos ya de camino al invierno...estos dias son ya frios y apetece un
buen caldo, asi que manos y a la cocina. Hoy los indigenas estaran todo
el fin de semana, asi que no se cuando podre pasar y decir algo, lo mismo
no pasa nada y me ven todos los dias, pero por si acaso no se me asusten.
Ya saben pasen feliz fin de semana y disfruten.
Zara