Andando sin rumbo, mi brújula se ha opacado no veo más el horizonte, ya no tengo un norte, ahora vago sin cesar.
Ente mío, ven a mí, llévame, tómame hazme ya no caer en el espinero, camino ahora dejando una huella de sangre que nadie verá.
Mis ojos cegados ahora por tanto llorar, la luz no divisan sino una simple oscuridad.
Ente mío, ente amigo mi corazón me duele, quitame las cuchillas,
aquellas que anidaron como dardos por la lejanía fría de un AMOR.
Un AMOR que era perfecto, pero por la torpeza de mi ser se alejó, para sólo ser una amigo más.
Ya no más rosas!!! Ya no más estás conmigo!!! Dame suelo, dame la mano
ente guardián, resguárdame... ... Estoy muriendo |