Pues me matricule de un curso de fisica que era tan dificil, tan
dificil, tan dificil, que no consegui siquiera encontrar la clase.

 

Pues a mi me gustan tanto los cocos que me como hasta lo de dentro.

 

 

 

Era un tio tan bajo, tan bajo, tan bajo, que se sentaba en una
peseta de canto y le colgaban los pies.

 

Era un futbolista tan malo, tan malo, tan malo, que marcaba gol
y fallaba en la repeticion.

 

 

Era un tio tan tonto, tan tonto, tan tonto, que cuando le dijeron
que se leyera un FAX primero desconecto la maquina para poder leerla
sin gastar electricidad

 

Era una iglesia tan estrecha, tan estrecha, tan estrecha, que el
cura daba las hostias de canto.