LA TERNURA LA TERNURA La ternura es el primer paso, sin ternura no hay buen carácter, no hay fluidez, no hay comunicación genuina; la ternura representa la comunicación desde la totalidad.
En toda manifestación de ternura hay una manifestación espiritual. Donde está la ternura está el agua derramándose, está el alma fluyendo realmente. Si tú me mueves por dentro, si tú me conmueves, si tu dolor se hace dolor en mi corazón, si yo me ocupo de ti, te presto atención y nace esa solidaridad en mi corazón, es porque existe ternura. Y esa ternura permite que nazca aquello que en mí es permanente, que no se deteriora, que es conciencia pura e inocente en mí. Ternura es inocencia consciente. La ternura no se prepara, no se mide, no se preconcibe. Surge y se derrama como un manantial, simplemente baña al otro. Es el lenguaje de la infancia, esa infancia permanentemente es el alma. Es la conciencia universal que nace del corazón, puedes enternecerte en tu interior y puedes conmoverte en silencio. |