En el verano de 1992 los puertorriqueños tomaron la bahía y las calles de la capital con música, coloridas banderas y fiestas interminables. Cientos de visitantes festejaban la hermandad de los países americanos nacidos a raíz del Descubrimiento de 1492.

Como parte de las actividades para conmemorar este evento histórico se organizó en Puerto Rico la Gran Regata Colón, que se llevó a cabo del 5 al 14 de junio en el Viejo San Juan. Ancladas alrededor de la bahía estaban más de 240 embarcaciones con una tripulación superior a las 8,000 personas. Un total de 43 países participaron en el magno evento náutico que atrajo a más de 100,000 espectadores diarios a las calles de la vieja ciudad capital.

El desfile de partida pudo observarse desde Boca de Cangrejos en Carolina hasta Punta Salina en Toa Baja. Un grandioso espectáculo artístico y una exhibición sincronizada de fuegos artificiales complementaron la Regata. De Puerto Rico la regata continuó su travesía hacia los puertos de Nueva York, Boston y Liverpool en Inglaterra. La actividad se caracterizó por su excelente organización y la armonía que reinó entre los participantes.