Flora
En las cañadas y lagunas: totoras, juncos,
cortaderas, espadañas, espertillo. En las arenas: olivillo En las sierras:
el casi desparecido Currumamuel y exóticas: eucaliptos, álamos, paraísos, pinos,
casuaruinos, tamariscos, etc. La vegetación es una pradera graminosa,
originalmente sin árboles; las especies arbóreas que hoy presenta son producto
de la forestación. La costa presenta extendidas playas arenosas de una
particular belleza paisajística. La estepa pampeana comprende toda la
provincia excepto el extremo sudoeste. En la zona oriental el suelo es
arcilloso, compacto y poco aireado determinando la ausencia de árboles y el
predominio de gramíneas. En cambio el occidente es arenoso, suelto
erosionable. La estepa es esencialmente herbácea y ha sufrido profundas
transformaciones.
Fauna
Garzas, flamencos, patos,
teros, martinetas, chajaes, comadrejas, zorros, zorrinos, vizcazchas, guanacos,
gatos del pajonal, venados, tucu-tuco, hurones, jabalíes, conejos, ñandúes,
ciervos exóticos, gran variedad de aves y peces. La intensa actividad
antrópica ha modificado los ambientes naturales de ésta Provincia. Antes de éste
brusco cambio, era común encontrar extensos pastizales. Éste ambiente fue
reemplazado por cultivos y árboles exóticos como el paraíso, el álamo, el pino,
el eucalipto, la acacia y el plátano. La antigua pradera sólo era interrumpida
por algún ombú. Éste arbusto gigante aún puede observarse hoy en día. Debido a
la baja cantidad de herbívoros, los pastos crecían y posteriormente morían
formando pajonales secos que nutrían al suelo con materia orgánica, pero a su
vez esto provocaba la disminución de nitrógenos. Los pastos predominantes son
las gramíneas. Los animales eran escasos. Entre los más comunes se destacan
el ñandú, el peludo, la vizcacha, el zorrino, el puma y el gato de los
pajonales. Entre las aves se destaca el chimango y el carancho. Además del tero,
el chajá y el loro. A orillas del Paraná el ambiente es muy distinto.
Subsisten montes de sauces, ceibales, laureles y algarrobos. Se agrega, además,
una variada fauna de reptiles como la peligrosa yarará, lagartos, batracios y
diversidad de aves. Destacan entre ellas el picaflor, el benteveo, el torno, el
chorlo y el hornero.
A mediados del siglo XVI comenzaron los cambios en el
bioma de la Provincia con la llegada de vacunos y equinos que se hicieron
cimarrones. Estos competían con el venado y el ñandú. Como eran más abundantes
sus defecas enriquecieron el suelo con nitrógeno, hecho que favoreció el
reemplazo de pastos duros por pastos tiernos. Este ganado desapareció lentamente
durante a principios del siglo XIX, debido a la curtiembre y al sebo. Fue
reemplazado por caballares y vacunos apropiados para las nuevas actividades
agrícolo-ganaderas. |