Odiar todas la rosas porque una te pichó.
Entregar todos tus sueños, porque uno de ellos no se realizó.
Perder la fe en todas las oraciones, porque una no fue atendida.
Desistir de todos los esfuerzos, porque uno de ellos fracasó.
Condenar a todas las amistades, porque una te traicionó.
No ceer en ningún amor porque uno de ellos te fué infiel.
Tirar afuera todas las oportunidades de ser felíz, porque una tentativa no se realizó.
Espero que en tu caminar no cometas locuras, recordando siempre.
Existe otra oportunidad.
Existe otra amistad.
Existe otro nuevo amor.
Existe una nueva fuerza.
Es solo ser perseverante y buscar ser más feliz cada día.
La gloria no consiste en nunca caer, más si de levantarse cada vez que fuera necesario.