SER GENEROSO
Da lo mejor de ti a los que te rodean.
Tus posesiones más valiosas son invisibles;
pero las hace visibles tu amor en tu sonrisa al afligido que te busca,
en la palabra de aliento al que va descorazonado por la vida,
en tu atención total al que requiere tu compañía
porque se siente aislado de todos.
Dá motivos de esperanza al derrotado.
A quien está irritado ofrécele tu silencio paciente y comprensivo.
Y de tu tesoro secreto ofrece, de continuo,
la riqueza de tus plegarias permanentes a Dios por la paz del corazón en
favor de tus hermanos en conflicto.
No hay mejor regalo que tu propio corazón
verdad.
Desconozco el autor