La vida es como un inmenso salón de baile.
Cuando uno es joven baila solo porque abundan la fuerza y la energía.
Al crecer, uno siente que va más lento y debe invitar a otros
y así comienza a compartir el salón con gente valiosa.
Gracias a todos ustedes por compartir el salón de mi vida!!!
Besos
Nidia