Cómo vencer el desánimo
NEHEMíAS 2.1-8
El desánimo puede robar la paz, la alegría y el contentamiento.
Pero le tengo una gran noticia si se siente desanimado: ¡usted no tiene que seguir así!
He conocido personas que parecían estar en una situación irremediable.
Pero unos años más tarde, estaban en una situación excelente, ya fuera
en términos de sus circunstancias o de sus emociones. ¿La razón? Nunca se
dieron por vencidas. En vez de entregarse a la autocompasión, optaron por
creerle a Dios, dar un paso de fe, y salir del foso emocional.
Nehemías es un buen ejemplo. Tenía todas las razones para sentirse
derrotado, pues su gente estaba en aprietos. Después de recibir la noticia de que
el muro de la ciudad estaba destruido, este varón de Dios se sintió profundamente
triste y desanimado. Y aunque el dolor inundaba su alma, clamó a
Dios buscando su dirección.
La tristeza en la presencia del rey se castigaba con la muerte. Pero el Señor
contestó la oración de Nehemías con un poder grandioso, lo que llevó al rey a notar
el semblante triste de su siervo, y a preguntarle después qué podía él hacer para
ayudarlo. Este milagro dio lugar a la reconstrucción del muro y a la liberación del pueblo
de Dios. El Señor puede tomar una situación irremediable, sea cual sea, y cambiarla de
maneras mucho más maravillosas de lo que usted pueda imaginar.
¿Vive usted en una espera ansiosa de lo que el Señor hará? ¿O ha decidido
permanecer en las profundidades de la desesperación? Al igual que Nehemías,
convierta su desánimo en una petición de ayuda a Dios. él puede renovar sus
esperanzas y evitar que las emociones negativas dominen su vida.
Charls F. Stanley