Moisás se levantó temprano pr la mañana, construyó un altar y ofreció a Dios ofrendas quemadas y ofrendas de paz. Después oró y leyó el Libro del Pacto (véase Éxodo 24:1-7).
Gracias a Dios que Él ya no nos pide que construyamos un altar de piedra, sacrifiquemos un toro, drenemos su sangre y edifiquemos una fogata para honrarle con un sacrificio ardiente.
Dios ya no quiere un sacrificio muerto. Él nos quiere a nosotros, sacrificios vivos, llenos de entusiasmo para servirle cada día. Lo único que tenemos que hacer es despertarnos y decirle:
"Gracias Señor. Te ofrezco sacrificio de alabanza. Me entrego como sacrificio vivo y dispuesto a vivir para Ti el día de hoy."
Joyce Meyer
Amado Padre celestial, los que te conocemos, los que te amamos con corazones agradecidos y humildes al abrir nuestros ojos por la mañana fluyen cánticos nuevos, himnos para Ti, porque es un gozo ver la luz de un nuevo día y saber que es por tu perfecta, santa y buena voluntad que podemos vivir un nuevo día, saber que Tú estás con nosotros como poderoso Gigante, y que has preparado con anticipación ese día para que lo vivamos junto a Ti, es suficiente motivo para alabarte, para adorarte y exaltarte, porque siendo Tú mi buen Pastor, nada me faltara, Siendo Tu, Jehová Rapha, mi Sanador Jehová el Shaddai, El más que suficiente, Jehová Jire, mi Proveedor Jehová Shalom, mi paz que mas puedo pedir Padre amado, con nada puedo pagar el perdón de mis pecados y mi salvación y lo único que puedo darte es mi alabanza y mi adoración, Te amo, oh Santo de Israel, te adoro mi Principe de Paz, mi rosa de Sarón, mi Lirio de los valles, a Ti sea toda la gloria y la honra. Amén
Ministerio Mujeres en Victoria Somos siervas de Dios que trabajamos por la restauración integral del Cuerpo de Cristo y especialmente en la restauración de la mujer en todas las áreas