Historias para reflexionar 4
LOS CLAVOS
Había un joven que tenia muy mal carácter.
Un día su padre le dio una bolsa
con clavos y le dijo que cada vez que
perdiera la calma debería clavar un
clavo en la cerca de atrás de la casa.
El primer día el joven clavó 37
clavos en la cerca...
Pero poco a poco
fue calmándose porque descubrió que era mucho mas fácil
controlar su
carácter que clavar los clavos en la cerca. Finalmente llegó
el día cuando
el muchacho no perdió la calma para nada... y se lo dijo a su
padre y
entonces el papa le sugirió que por cada día que controlara su
carácter
debería sacar un clavo de la cerca.
Los días pasaron y el joven pudo
finalmente decirle a su padre que ya había
sacado todos los clavos de la
cerca... entonces el papá llevo de la mano a
su hijo a la cerca de atrás...
Mira hijo, has hecho bien... pero fíjate en todos los agujeros que quedaron
en la cerca... Ya la cerca nunca será la misma de antes... Cuando dices o
haces cosas con coraje, dejas una cicatriz como este agujero en la cerca...
Es como meterle un cuchillo a alguien, aunque lo vuelvas a sacar, la herida
ya quedo hecha...
No importa cuantas veces pidas disculpas, la herida
esta ahí. Una herida
física es igual de grave que una herida verbal... Los
amigos son verdaderas
joyas a quienes hay que valorar... Ellos te sonríen y
te animan a
mejorar...Te escuchan, comparten una palabra de aliento y
siempre tienen su
corazón abierto para recibirte...
Demuéstrales a tus
familiares y amigos cuanto los quieres... Manda este mensaje a quien consideres
AMIGO... AMIGA... Gracias a todos y cada uno de ustedes... Que
Dios y la
Virgen María nos ayude a sanar de nuestras heridas y a olvidar las cicatrices,
para así seguir construyendo un mundo mejor...