GRACIAS AMIGO
Que más diera yo por aceptarte en mi vida,
me has confesado que estas enamorado,
pero creo que de la persona equivocada,
porque yo, yo soy una mujer casada.
Que ironías de la vida y del destino…
mientras hay alguien que se hinca por besar mis pies,
hay quien teniéndome a su lado, no le importa si estoy bien,
no puedo dar marcha atrás, pues mi vida es un torbellino.
Mis hijos son mi única prioridad,
me olvidaré de mi felicidad,
y seguiré adelante en realidad,
buscando que me brinden amistad.
Gracias a la vida, gracias al amor,
gracias a Dios por sus bendiciones,
por todas sus adhesiones,
por sentir ese abrazo abrigador.
Gracias amigo, gracias por respetar mi proceder,
preferiste antes irte lejos, que lastimarme con tu terquedad,
pues bien sé que en el corazón no se manda,
pero prefiero una bonita y sincera amistad.