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General: LA PALABRA DIARIA MES DE MAYO
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| De: Tatisverde (Mensaje original) |
Enviado: 19/05/2024 04:11 |
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Oración
Soy un ser espiritual, un canal abierto para la expresión divina.
La oración es mi camino para una vida exitosa. El orar facilita mi búsqueda por mayor luz y comprensión. La oración es el avivamiento del Espíritu en mí, es profundizar y expandir mi fe innata.
Conocerme como un ser espiritual despierta en mí una capacidad mayor para vivir y dar. Mantener mis pensamientos y sentimientos alineados con la Mente Divina me hace un canal más abierto para la expresión del Espíritu. Al despertar las cualidades divinas en mí, creo mayor entusiasmo y vitalidad.
Mientras más aumento mi conciencia del espíritu abundante de Dios en mí, más soy bendecido en todo lo que hago, y afronto las experiencias de la vida con mayor éxito. Por esto, siento agradecimiento.
Perseverad en la oración, velando en ella con acción de gracias.—Colosenses 4:2
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Comunicar
Me comunico con sabiduría y amor.
En cada interacción con los demás, elijo comunicarme con sabiduría, prudencia y autenticidad. Utilizar palabras positivas para expresar mis ideas y deseos me permite ser una fuerza para el bien en el mundo, y me ayuda a cocrear con Dios cada actividad y área de mi vida.
Con cada una de mis palabras, ya sean escritas o habladas, transmito ideas poderosas que pueden alentar o descorazonar a la persona con quien me comunico. Así que elijo comunicarme afablemente por cualquier medio que sea.
La comunicación sincera y considerada propicia confianza y comprensión. Mis palabras tienen un impacto positivo ya que me comunico con sabiduría y amor.
Jesús, deteniéndose, los llamó y les dijo: “¿Qué queréis que os haga?”—Mateo 20:32
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Remontarse
Pongo mi fe en Dios y mi espíritu se remonta.
Dios en mí es mi fortaleza espiritual, el poder que apoya el desenvolvimiento de mi vida, la fuerza que eleva mi espíritu, mente y cuerpo. Soy llamado a ir más allá de los parámetros que me he fijado según llevo a cabo mi propósito divino.
Ejercito mi fortaleza espiritual cada vez que hago algo nuevo, bien sea que comience un programa de ejercicios o un negocio. Digo una oración antes de comenzar cualquier actividad. Tal como lo hace el águila, me remonto; dejando ir el temor y las limitaciones y haciendo uso de la fortaleza y las habilidades que Dios me ha dado. ¡Pongo mi fe en Dios y mi espíritu logra nuevas alturas!
¡Bienaventurado el hombre que tiene en ti sus fuerzas, en cuyo corazón están tus caminos! —Salmo 84:5
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