Comenzamos pochando en un sartén con aceite de oliva, media cebolla y una zanahoria picadas finamente durante unos 10 minutos a fuego medio. Una vez pochadas retiramos y reservamos.
2.- En un bol, mezclamos la carne picada, el huevo, el queso, las especias, la rebanada de pan remojada en leche y el sofrito anterior. Mezclamos muy bien con las manos.
Ahora no toca dar forma a las albóndigas, sé que es un poco rollo pero es un trabajo que se puede hacer en familia. Las pasamos por un poco de harina y las ponemos en un bandeja de horno. Les ponemos un chorrito de aceite de oliva y las horneamos a 220 grados con calor arriba y abajo unos 10 minutos
Por otra parte hacemos la salsa de tomate, en un cacerola pochamos una cebolla y 2 dientes de ajo.
5.- Una vez rehogados, agregamos el tomate cortado en trozos. No os preocupéis porque luego pasaremos la salsa. Dejamos cocinar unos 25 minutos a fuego lento. Rectificamos de sal y azúcar para quitarle la acidez.
6.- Pasado ese tiempo trituramos la salsa y la pasamos por un colador para quitar el resto de pieles.
7.- Reincorporamos la salsa de tomate triturado a la cacerola y metemos la albóndigas. Cocinamos unos 15 minutos a fuego suave para que se terminen de hacer por dentro y listo. Podemos poner perejil picado al final para darle un toque de frescor.