Soñar es abrir una puerta de la mente.
Todas las esperanzas, ambiciones,
deseos, miedos, fantasmas, amigos,
tiempos buenos y malos residen allí,
son parte de la mente primitiva y
constituyen una vía de acceso a
realidades que
están más allá del alcance de la lógica,
han sido objeto de estudio a través
de los siglos y forman una parte
importante del psicoanálisis moderno.
Sabemos que tus sueños son únicos.
Ninguna otra persona puede tener tus
antecedentes, tus emociones, o tus
experiencias.
Cada sueño se conecta con su propia
"realidad". Por lo tanto, al
interpretarlos, es importante ponerlos
en el contexto de tus experiencias y
vida personal.
Recuerda que un sueño unifica al
cuerpo, mente, y espíritu. Provee
conocimientos sobre nosotros
mismos y medios para la exploración
de la propia personalidad.
Si comprendes tus sueños, te habrás
conocido y entendido un poco mejor
y puedes llegar a conocer y mejorar
aspectos de tu propia personalidad.
COMO RECORDAR LOS SUEÑOS
Es aconsejable dedicar algunos
momentos de reflexión al
despertarse: permanecer tranquilo en
la cama, con los ojos cerrados,y
el cuerpo relajado.
Después, preguntarse: ¿Qué era
exactamente lo que estaba soñando?
Al principio puede recordarse sólo
un pasaje o a recordar las propias
imágenes
nocturnas; si se ha pasado toda la
vida ignorando los sueños es posible
que haya que dedicar muchos días
sólo para empezar a recordarlos.
Un buen consejo: irse a la cama con
la cabeza despejada; el estar
demasiado cansado puede nublar la
memoria a la mañana.
Además, se ha demostrado
que dándole a la memoria el tiempo
necesario para que busque, pueden
reconstruirse secuencias.
El recuerdo del sueño puede
entrenarse, intentando pensar durante
algún tiempo acerca de todo lo
qué se ha soñado antes de levantarse
y escribiéndolo seguidamente.
CONSEJOS
Antes de ir a la cama, ten la mente clara. Dí a tí
mismo: "Recordaré mi sueño cuando despierte".
Esta es realmente una manera probada y efectiva
para ayudar a recordar los sueños.
El tener demasiados pensamientos en
tu mente puede distraerte y evitar que recuerdes
tu sueño en la mañana.
Acuéstate y levántate a horas regulares. Házlo una
rutina. Irse a la cama y despertar a una hora regular
todos los días ayuda en el recuerdo del sueño.
Evita el consumo de alcohol y medicinas antes de
ir a la cama. Pueden impedir que recuerdes tu
sueño.
Comer alimentos pesados cerca de la hora de
acostarse también puede desviar recursos
corporales lejos del cerebro y evitar el recuerdo
del sueño.
Guarda un lápiz/cuaderno o grabadora cerca a tu
cama para que esté a tu alcance tan pronto como
despiertes. Mantener una lámpara cerca de la cama
es también una buena idea por si despiertas en
medio de la noche y quieres registrar tu sueño
inmediatamente.
(Artículo tomado de la red).
Con amor...
Flaquita