Hagamos como los pájaros cuándo la tormenta arrasa con sus nidos...construyen otro, vuelo a vuelo y paja a paja. Con esfuerzo, sí, pero también con alegría, pues recordemos que el canto acompaña su faena, la cual será coronada con el éxito al ver su nido reconstruído. Si las aves que son animales irracionales se levantan del dolor...¿de que no seremos capaces nosotros que tenemos raciocinio?
Gracias Ashcen querida, como de costumbre, nos has dejado una hermosa y profunda reflexión...¡te requiero amiga mía!!
Flaquita