Los romanos tenían por costumbre espolvorear el lecho de los recién casados con hebras de azafrán, ya que creían que su penetrante aroma incitaba al amor. Desde entonces, muchas culturas han venerado esta especia como el mejor elixir amoroso.
YO VOY MUERTA, en Uruguay el azafrán que hay es importado de España, vale carísimo y no es en hebritas.....mmmmmm
MELITA