¡Dignos de admiraciòn!, todo mi respeto para Japòn.
Lamentablemente en Mèxico es todo lo contrario, para empezar la prensa sensacionalista y amarillista nos informa de las catastrofes sufridas, con visos màs que alarmantes; las compras de pànico se hacen presentes, todos piensan en sì mismos y en sus familias, y si tienen los medios econòmicos, acaparan todo lo existente en alimentos, sin hacer un càlculo real de sus necesidades, y mucho menos piensan en los màs desfavorecidos...la condiciòn humana tiende a ser egoìsta; los comerciantes desde luego "hacen su agosto", y suben al triple el costo de los productos bàsicos; empieza el saqueo, la gente de pocos o nulos escrùpulos saquea las tiendas y las casas que han quedado solas porque sus ocupantes estàn en algun refugio...¡que triste!
A mì en lo personal, me ha tocado vivir una situaciòn emergente con el huracàn "Opal". La casa donde vivìamos se inundò y tuvimos que salirnos a un lugar màs seguro, nos fuimos a casa de unos familiares de mi esposo. Obviamente lo que menos pensamos fue en salvar los bienes materiales, solo cogimos la ropa que pudimos salvar. Las tiendas al dìa siguiente, estaban abiertas, pero un huevo lo vendìan a precio exhorbitante, y una vela que en ese momento era indispensable pues no habìa luz, la conseguìamos a precio de oro, los supermercados quedaron vacìos, tantito por la codicia del comerciante que escondìa los productos para poder sacarlos a los pocos dìas y venderlos al doble, y el resto por el saqueo de los ladrones, que sin importarles el peligro, salieron dentro de la lluvia, con el agua a la cintura, aprovechando la ocasiòn y confusiòn, a robar lo que podìan cargar...¡no habìa alimentos! Si estuvièramos educados como el pueblo de Japòn, otra cosa serìa cuando una catàstrofe natural, nos golpea...y eso que somos un pueblo solidario ¿eh?...¡que lamentable!..y bueno, creo que no somos los ùnicos, la mayorìa de los paìses reaccionan asì.
Gracias querido amigo Salva!!
Flaquita