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De: SORBER (Mensaje original) |
Enviado: 04/06/2011 19:14 |
EL ACTUAR PERVERSO
por Marie-France Yrigoyen
Cuando a un perverso se le pregunta algo directamente, elude la comunicación. Como no habla, impone una imagen de grandeza o de sabiduría. El agresor niega la existencia del reproche y la existencia del conflicto. Con ello paraliza a la víctima , pues sería absurdo que ésta se defendiera de algo que no existe. A la víctima se le niega el derecho a ser oída. Al perverso no le interesan su versión de los hechos, y se niega a escucharla. El que rechaza el diálogo viene a decir , sin decirlo directamente con palabras, que el otro no le interesa, o incluso que no existe.
Cuando los perversos hablan con su víctima , suelen adoptar una voz fría, insulsa y monocorde. Una voz sin tonalidad afectiva, que hiela e inquieta. El perverso no suele alzar la voz, ni siquiera en los intercambios más violentos; deja que el otro se irrite solo. El mensaje de un perverso es voluntariamente vago e impreciso y genera confusión. Luego, elude cualquier reproche diciendo simplemente "Yo nunca he dicho esto". Al utilizar alusiones, transmite mensajes sin comprometerse. También se abstiene de terminar sus frases.
Envía a si mismo, mensajes oscuros que luego se niega a esclarecer. Estas palabras son agresivas pero se dicen en un tono "normal", tranquilo, casi sosegado.
Otro procedimiento perverso consiste en nombrar las intenciones del otro, o en adivinar sus pensamientos ocultos, con lo que el agresor da a entender que conoce mejor que la víctima lo que ésta piensa.
En lugar de mentir directamente, el perverso prefiere utilizar un conjunto de insinuaciones y de silencios a fin de crear un malentendido que luego podrá explotar en beneficio propio. Las cosas se dicen sin decirlas , esperando que el otro comprenda el mensaje sin tener que nombrarlo. Dígase lo que se diga, los perversos siempre encuentran la manera de tener razón, y esto les resulta más fácil cuando ya han logrado desestabilizar a su víctima.
El desprecio y la burla dominan la relación del perverso con el mundo exterior. El desprecio afecta al compañero odiado, a lo que éste piensa y hace, pero afecta también a su círculo de relaciones.
Tanto las maldades, o las verdades que duelen , como las calumnias o las mentiras, nacen casi siempre de la envidia.
La agresión se lleva a cabo sin hacer ruido , mediante alusiones e insinuaciones , sin que podamos decir en qué momento ha comenzado ni tampoco si se trata realmente de una agresión. El agresor no se compromete. A menudo , le da incluso la vuelta a la situación señalando los deseos agresivos de su víctima "Si piensas que te agredo, es que tu misma eres agresiva"
A diferencia de lo que ocurre en los conflictos normales , con un perverso narcisista no se produce un verdadero combate, por lo que tampoco resulta posible la reconciliación. No levanta nunca la voz y manifiesta únicamente una hostilidad fría. Si alguien se la señala, la niega. Una vez que su compañero se exaspera o grita, resulta fácil burlarse de su ira y ridiculizarle.
El "quitar el seso" denigra y descalifica a un individuo, pero también se extiende a todo su círculo de allegados.
Para un perverso, el placer supremo consiste en conseguir la destrucción de un individuo por parte de otro y en presenciar ese combate del que ambos saldrán debilitados y que, por tanto, reforzará su omnipotencia personal.
Sembrar la duda mediante alusiones, o al guardar silencio sobre ciertos asuntos, es una hábil manera de atormentar al compañero, de reforzar su dependencia y de cultivar sus celos.
La toma de poder se lleva a cabo mediante la palabra. Se trata de dar la impresión de conocer mejor las cosas, de detentar una verdad.
Los perversos dan mucha seguridad a las personas más frágiles. Se establece un funcionamiento totalitario que se basa en el miedo y que procura obtener una obediencia pasiva . La víctima debe actuar tal como lo espera el perverso y debe pensar según las normas de éste último. El espíritu crítico deja de ser posible.
SORBER. |
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Bueno tu mensaje
Esos son los que yo llamo
manipuladores.
LEONOR |
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De: FLAQUIS |
Enviado: 05/06/2011 10:50 |
La actitud de un perverso, es por demàs, cobarde. Generalmente no ataca de frente, sino que lo hace con la màxima hipocresìa, fingiendo inocencia mientras mancha y denigra a gente inocente...¡que pena que exista gente asì!, parece màs bien, personajes ficticios sacados de la imaginaciòn de un novelista.
No logro entender estas conductas, aunque desde luego, deben obedecer a algo que envolviò la vida del perverso, desviando la bondad natural de su corazòn y neutralizando la esencia de su ser.
Estamos hechos a Imàgen y Semejanza de DIOS, por lo que nadie nace malo, y por màs que la maldad se adueñe de los sentimientos de alguien...siempre habrà un dejo de bondad en el fondo de su alma.
Gracias mi niño!!
Flaquita |
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