Hola mis queridos amigos de 60!!!
He andado estos dìas, con una actividad tremenda que no me ha dejado apenas espacio para mì...¡pero estoy muy contenta!
Les cuento que antes de antier (anteayer, para algunos) llegaron familiares de Toluca y de Valladolid, para acompañar a mi nena en su Primera Comuniòn.
Desde dìas antes, tuvimos trabajo, pero antes de antier, fue criminal realmente, desde en la mañana temprano, a las 7, ya estabamos en la calle, fuimos a dejar a la nena al cole. Para colmo, a mi hija Yandra la mandaron a curso a la ciudad de Mèxico, y mi hijo Chapu, tambièn estaba allà, asì que ni hablar, Laurita por un lado y yo por el otro, nos movimos todo el dìa en taxis, pues ninguna de las dos manejamos...¡una locura! ir de un lado a otro cerrando los contratos que tenìamos para la celebraciòn.
A las 6 y tantos de la tarde, empezaron a llegar los familiares...y nosotros continuàbamos en la calle, ni tiempo tuvimos de comer. A la hora que llegaron, yo estaba en el local, recibiendo las mesas, sillas y manteles. Ya en la noche, un amigo de mi hijo, nos hizo favor de llevarnos al super por lo ùltimo que nos faltaba, y luego a casa, por fìn. èl, muy lindo, se fue al local a acomodar las mesas y disponer el equipo de sonido.
En casa, cansadas pero felices, bromeamos, convivimos y...¡cenamos por fìn! con la familia a quien nos diò mucho gusto ver. Una sobrina que vino de Valladolid, se puso a hacer el pastel...¡delicioso! (luego les paso la receta, super fàcil, rico, vistoso y ràpido), dejò todo listo para terminar antier por la mañana, asì que nos acostamos màs o menos a las 3 de la madrugada.
Antier, mi nena se veìa hermosa, pero...¿que creen? pues que tal vez por los nervios, la tensiòn (es muy tìmida, y eso influye), aunada al incienso, la puso mal. Estabamos en la segunda banca, hasta adelante, y frente a nosotros, a un lado del altar, estaba el Padre Sebastiàn, que es el director del colegio, con otro de los padres, y el Señor Obispo que fue quien oficiò la misa y diò la Comuniòn. El padre Sebastìan nos hizo una seña, nosotros no nos habìamos dado cuenta, pero la nena estaba a punto de desmayarse. Se puso helada, verde, y los labios blancos. La sacamos de inmediato, y en el atrio de la catedral, le dabamos aire y tratabamos de tranquilizarla. Su maestra le diò un chocolate y un señor fue a comprarle una coca cola...el color empezò a normalizarse, lo mismo su pulso que estaba lento. Entramos nuevamente justo a tiempo, en que los chiquitos se formaban para recibir el Sacramento. Ya sin ningùn otro contratiempo, gracias a DIOS, transcurriò la celebraciòn.
De ahì nos fuimos al local...¡un èxito la fiesta!, todo resultò de maravilla, la gente adulta estaba muy a gusto charlando y los niños...¡no pararon de divertirse!. Les rentè un "brincolìn" grande, asì que se dieron vuelo los chiquitos brincando y "trepando". Tambièn les llevamos una esfera acuàtica y durante 6 horas no dejaron de subirse, parecìan ardillitas jeje. Otros niños màs grandes, les llamò màs la atenciòn la piscina y ahì se estuvieron como pecesitos.
Casi antes de finalizar la fiesta, rompieron dos piñatas...¡y ahì veìan a los padres de los niños, corriendo a "pescar" los dulces (ahì me entrò la duda, sobre para quien era la piñata, si para niños o para adultos jajajaja).
La verdad, DIOS ha sido maravilloso con nosotros, despuès del problema que tuvimos con el local ¿se acuerdan?, èste que conseguimos resultò perfecto. Y temìamos que nos lloviera, pues, vean como sucediò todo para que no se estropeara nada. Cuando entramos nuevamente a la catedral despuès del incidente con mi nena, cayò un verdadero chubasco...¡ufffff pensamos que ya se nos echaba a perder la fiesta!...nada de eso, cuando salimos de la iglesia, el cielo estaba completamente despejado con un sol abrasador. La comida tambièn muy rica, mandamos a hacer lechòn tostado y todos le "entramos" con ganas, en verdad deliciosa.
Excuso decirles que para las 10 de la noche, ya no dabamos una, estabamos realmente muy cansadas Laurita, Yandra y yo.
Yandra regresò a tiempo, y fue madrina tambièn de primera comuniòn de una pequeña, a las 8 de la mañana, y a las 12 del dìa, lo fue de Marianita.
Aùn asì, cansadas, pero felices, seguimos "el relajo" en casa con los familiares que vinieron de fuera. y ayer, otro festejo, por el dia del padre y por el cumple de mi hija Yandra, ademàs del "recalentado". Ya anocheciendo se fueron los familiares a su lugar de origen, porque solo vinieron para la Primera Comuniòn, y con el tiempo muy medido.
Como comprenderàn, no tuve tiempo de estar en la casita, apenas pude poner los evangelios...¡ahì los tienen! en su lugar y a tiempo (Lèanlos)...pero ya mañana (al rato) mas descansadita podrè dedicarme màs a la casita.
Bueno, no podìa dejar de pasar esta maravillosa experiencia sin compartirla con ustedes, que como siempre, me leen con paciencia.
Gracias amigos mìos, nos leemos mañana (al rato). pero no olviden que les amooooooo
Con amor...
Flaquita