te tengo en mi mente
en mi cuerpo,
y en todo lo que yo tanto
deseo, te tengo en mi espíritu
y en mi agonía
lo tanto que tu me decías
ángel que vuela
con sus blancas alas
reforzando sus alas al bolas
asiendo un canto melodía
agitando su cuerpo,
tanto que parece bailar
un baile exótico
sin igual
con una risa angelical
todavía recuerdo esas blancas alas
que parecen algodón
eran tan largas
como las de un cisne
y tan hermosas como las de un
pavo real
suaves como el pétalo de una rosa
celestial
de un mágico ángel
sensacional.
SORBER.