Adivina, adivinador
La duquesa invitó a toda la realeza a tomar el té en su palacio.
Como estaban muy aburridos, la duquesa propuso jugar a las adivinanzas, juego en el cual ella era muy buena. Entonces, mirando a través de la ventana, ve a su hija montando a caballo y dice:
-Ya está. Ahí va la primera:
-GRANDE Y BRIOSO Y ENTRE LAS PIERNAS DE LA MUJER SE PONE NERVIOSO...- .
-Ya sé ´¡LA PORONGA!. Dice un invitado.
-Oh! Dios mío!! Es usted un mal educado y un vulgar Como se le ocurre
Se ofende la duquesa e indignada dice:
-Jaime, por favor traiga la capa y el sombrero que el Conde se retira.
-¡Oh no! Discúlpenlo, por favor dele otra oportunidad. Suplican los invitados.
-Bueno Por esta vez lo disculpo, pero que no se repita.
La duquesa ve a una invitada jugando con una sortija de matrimonio en el dedo y dice:
-ES REDONDA Y BRILLANTE Y A LAS MUJERES LES ENTRA COMO UN GUANTE...
-¡LA PORONGA!. Dice el mismo invitado nuevamente.
-¡Oh! Esto es terrible, es inadmisible e imperdonable, Jaime, traiga la capa y el sombrero que el Conde ahora sí se va. Grita la duquesa.
-No, por favor, dispensen mi mala educación, prometo que no se ha de repetir. Contesta el Conde.
Todos los invitados le piden a la duquesa una última oportunidad.
-Bueno, pero será la ÚLTIMA VEZ que soporto una grosería semejante. Responde la duquesa muy seria.
La duquesa observa a un invitado metiendo la tostada en el té y dice:
-Ahí va la tercera:
-ENTRA SECA Y ESPONJOSA Y SALE MOJADA Y BABOSA.
El invitado grita:
-JAIME, TRÁIGAME LA CAPA Y EL SOMBRERO PORQUE ESO ES UNA PORONGA DE ACA A LA CHINA...