HACIENDO QUE BRILLE LA LUZ
Por José H. Baseti
El hecho de ir caminando por la vida, significa que hay que tener
mucho cuidado, con lo que se hace, con lo que se dice y hasta con
lo que se piensa. Podría uno tropezar y caer.
Sentimos a veces que vientos adversos nos azotan, y aunque
no es propicio el momento, tenemos que detenernos a pensar.
Esto es un dilema como el que se refería a Hamlet, el príncipe de Dinamarca,
según la obra literaria de William Shakespeare: “Ser o no ser”.
Pasamos por la vida muchas veces sin definir claramente cuales
son nuestras posiciones y el rumbo que vamos a tomar.
Y tampoco podemos dejar que los demás piensen por nosotros,
hablen por nosotros, decidan por nosotros.
Cada entidad, cada persona, cada ser humano debe ser respetado
en sus derechos, a llevar el control de su vida y sus asuntos
como quiere; a discernir; a hacer su aprendizaje, a defenderse contra
todo aquello que afecte su dignidad personal, a vivir de acuerdo a sus
ideas y manifestarlas; a buscar caminos de superación; a sufrir sus
propios quebrantos y desengaños, a mantener viva su esperanza y a
morir, si eso quiere, por una causa justa, rechazando la incredulidad
de muchos....
NANA