que el tiempo girara de otro modo.
Haría falta enumerar los días según diversos ritos
y una palabra fecundara estos años circulares.
Haría falta
que enarbolando el enigma de todas las distancias
susurráramos signos que desconozco
y los ojos subterráneos diseñaran caminos
o el silencio se deslizara despacito
por las secretas fisuras de la casa.
Hará falta
que atardeciera el viernes desnudo de presagios
y fuera larga la quietud de los olivos.
Hará falta, en fin,
que con minutos de distintas magnitudes
se moldearan columnas
que sostuvieran el encuentro de este encuentro
teresa calderon.