Sabías por qué decimos VERDADES COMO PUÑOS para significar que se trata de una gran verdad?
Esta frase —como tantas otras— no tiene un origen concreto, sino que es fruto de una asimilación o comparación con algo real y muy cercano, que por eso mismo goza de popularidad y acaba fijándose al lenguaje.
El puño sirve de referencia para frases ponderativas sobre el tamaño. Antiguamente se usaba por defecto y por exceso, es decir, tanto se decía esa oveja es como un puño (para decir que es pequeña), como se decía ese guisante es como un puño (para decir que es grande).
En la actualidad solamente es corriente el uso que otorga un gran tamaño, y son habituales frases como diamantes como puños, lágrimas como puños y verdades como puños.
Sabemos el tamaño habitual de un diamante o de una lágrima y podemos comprobar lo exagerado de la frase, pero una verdad no tiene presencia sólida ni tamaño, pero aún así se asimila el uso ponderativo y se acepta el significado de una verdad muy grande, muy cierta y —nuevamente acudiendo a la imagen de un puño— muy sólida.