Leonardo Tusam enfrenta su mayor prueba por estas horas. El heredero de la hipnosis se metió ayer la mediodía en una cámara hecha con 200 bloques de hielo a metros del Obelisco, en el centro porteño. ¿Pero por qué? Se cumplen diez años de la muerte de su padre y Leo quiere homenajearlo.
Entre las calles Diagonal Norte y Cerrito se instalaron pantallas para transmitir lo que sucede minuto a minuto. El público puede verlo en todo momento, y al mismo tiempo, Leo puede escuchar todo lo que ocurre afuera.
El hijo del famoso hipnotizador Tusam -nombre artístico proviene de las palabras técnica, unción, sabiduría, amor y mística- debe controlar el oxígeno y el ritmo cardíaco para soportar diez grados bajo cero dentro de la cámara de hielo. Además, sus colaboradores están atentos a las señas del mentalista y hay una ambulancia lista por cualquier emergencia.
¿Cuándo saldrá? En principio se quedará hasta que su resistencia corporal se quiebre. Sin embargo, y aunque Tusam hijo aclaró que no se pondrá ninguna meta horaria, se habló de 24 horas dentro de las siete toneladas de hielo.
Tusam hijo ya realizó una prueba similar durante el programa de Marcelo Tinelli hace cuatro años. Pero la hazaña nunca llegó a la meta prevista porque su ritmo cardíaco bajó más de lo previsto y debió ser rescatado. Esta vez, ¿podrá batir su propia marca?