Buenos Aires, 10 de octubre (Télam).- El día del dulce de leche se celebra mañana en la Argentina, país donde más se consume este alimento que, junto al mate, las empanadas y el asado, forma parte del patrimonio cultural gastronómico argentino.
El dulce de leche, que puede aparecer en distintas formas, como familiar, repostero, heladero, puede elaborarse con leche de vacas, ovejas, cabras y búfalas, informó el Centro Argentino de Promoción del Dulce de Leche y Afines.
Existe en muchos países con distintos nombres como doce de leite, milk sweet, confiture de lait, radaby, fanguito y cajeta, y su origen es aún indefinido, ya que varios países se atribuyen su invención.
Algunos relatos cuentan que en Chile, el general José de San Martín lo degustó, en su estadía tras su gesta libertadora y que pronto el dulce se trasladó a Mendoza y luego a Buenos Aires.
En Francia dicen que el hallazgo, que fue accidental, ocurrió en la campaña Napoleónica y que los veteranos enrolados en el corso, recibían a diario una ración de leche azucarada caliente.
Un cocinero que estaba preparando la mezcla, abandonó la olla con la leche y el azúcar en la hornalla encendida, y al hervir se transformó en dulce de leche, y el cocinero entró en la historia francesa, como su inventor en 1815.
En nuestro país, dicen que en una estancia de la provincia de Buenos Aires se encontraba una criada mulata de Juan Manuel de Rosas, preparando la lechada para hacer unos mates, quien estaba por llegar para firmar el Pacto de Paz, con el general Juan Lavalle.
Al darse cuenta de que en el catre de Rosas se encontraba Lavalle descansando, salió a pedir ayuda y abandonó la olla, con leche y azúcar, en la hornalla encendida y al hervir se convirtió en dulce de leche, en el año 1829. (Télam).-