El brillo del sol renace al amanecer llenando
de vida las llanuras, las flores renacen
su brillo y la luna se despide de su amado,
con sus últimos reflejos de luz y acompañada
de un manto de estrellas se recoge en
el infinito, prometiendo a su amado volver
a verlo en el universo que rodea su rito
en el ocaso que encuentra su vida en la
mañana en la noche, en la vida y en la
esencia, es su luz la que dibuja rayos en
nuestro ser, a veces olvidamos sentir su luz
pero ellos siempre rodean nuestras vidas,
de una o otra manera porque somos testigos
del amor del cosmos, amor que recibimos
así sentimos en los demás al escuchar el eco
de nuestro corazón, para ver como brilla
nuestro amanecer de felicidad, en
luna o sol que nos rodea. Cada dia que
amanece, levanta los ojos y llena de
rayos tu espacio y el de los demás.
Me gustó y se los envio.
Mara