Una señora va a la iglesia, durante la misa el padre pregunta: ¿Cuántos quieren ir al cielo? Todos responden: ¡Yo! Y la señora se queda callada. El padre pregunta de nuevo: ¿Cuántos quieren ir al cielo? De nuevo todos dicen: ¡Yo! Y la señora callada. El padre pregunta: Señora, ¿Usted no quiere ir al cielo? La señora responde: Yo sí quiero, pero me voy en otro viaje porque este está muy lleno