Me temo que las fuerzas de la Naturaleza no se detendrán, a menos que ellas quieran -y es que, cuando a la Madre Naturaleza se le acaba la paciencia y se alza encabritada sobre sus patas traseras... -, pero bueno: no está de más pedir las cosas. Esto debiera servir para no perder la cuenta de lo poco que somos, a efectos planetarios,
dios que la fuerza de tu divina naruraleza,tenga piedad y misericordia para estos hermanos en japon ..asi seaa
幸運を祈る, buena suerte, Japón.