Casarse es bueno para la salud
Vivir en pareja y estar casado es muy beneficioso para la salud. Un
exhaustivo estudio sostiene que, aunque el matrimonio puede estar lleno de
dificultades y estrés, la evidencia científica demuestra que “vale la pena” ya
que mejora los estándares de salud de quienes se casan.
La investigación, que publica esta semana el ‘British Medical
Journal’ (BMJ), estuvo a cargo de la Universidad de Cardiff, en Gales (Reino
Unido) y asegura que mejora sobre todo el estado físico de los hombres y la
salud mental de las mujeres, según un estudio
Se analizaba el impacto que tiene para la salud vivir en pareja. Uno
de ellos, incluso, mostraba que las parejas casadas tenían una tasa de
mortalidad entre un 10 y 15 por ciento más baja que la del resto de la
población.
De este modo, observaron que las relaciones de pareja de larga
duración tienen una mejor calidad de vida, relacionado por los autores con un
mayor apoyo social que, según aseguran, comienza en su propia pareja, lo que
también “favorece un estilo de vida más sano y una mejor salud emocional y
física”.
Sin embargo, los investigadores observan que estos efectos
protectores varían de acuerdo al tipo de relación, distinguiendo entre vivir en
pareja y estar casados.
“Cuanto mayor es el compromiso con la pareja, mayor beneficio para la
salud”, aseguran, comprobando efectivamente que las parejas casadas viven
más.
Igualmente, observaron también que el matrimonio es “especialmente
beneficioso” para la salud mental de las mujeres, mientras que los hombres que
vivían en pareja pero no estaban casados tenían una muy buena salud fisica,
según los autores, porque “las mujeres tienen una influencia más positiva en el
estilo de vida de su pareja”.
En el estudio también se observó que la duración de las relaciones
también afectaba a la salud, siendo mayor el beneficio en las parejas que
llevaban más tiempo juntos.
Por contra, los autores no han querido ampliar estas conclusiones a
las parejas del mismo sexo, ya que “hasta ahora no se ha logrado obtener
evidencia” como con las parejas heterosexuales.
Sin embargo, los investigadores del estudio reconocen a la BBC, en
declaraciones recogidas por Europa Press, que en ocasiones es “mejor vivir sólo
que mal acompañado”, ya que las relaciones difíciles y estresantes, tanto de
corto o largo plazo, tienen un impacto negativo en la salud y en estos casos,
“poner fin a la relación trae consigo beneficios para la salud
mental”.
“Ser soltero está asociado con una mejor salud mental que estar en
una relación difícil”, aseguran los autores.
En el estudio también se ha tratado de definir cuál es el mejor
momento para establecer un compromiso duradero de pareja, determinando que para
los hombres es después de los 25 años y para las mujeres entre los 19 y los 25
años.
Los investigadores subrayan, sin embargo, que hasta ahora la
evidencia científica no ha logrado confirmar si la buena salud mental de un
individuo conduce a una buena relación de pareja o viceversa.
“Hay una hipótesis que dice que los individuos bien adaptados tienen
más probabilidades de establecer relaciones de largo plazo”, explican,
destacando que sobre esto “es probable que los beneficios de salud observados no
sean sólo la causa de tener una buena relación de pareja”.