De la Red
Brasil sigue de luto por a muerte de 12 niños en un tiroteo en una escuela de Río de Janeiro. Las cámaras de seguridad del centro recogieron a algunos alumnos huyendo desesperados y manchados de sangre. También captan la imagen de Wellington Menezes de Oliveira, exalumno del centro y autor de la matanza, armado con dos pistolas. Minutos más tarde se suicidaría. La policía ha encontrado una carta firmada por él con instrucciones para su entierro. Pide no ser tocado por "impuros" y que se le entierre envuelto con una sábana que él mismo dejó en una sala del colegio (08/04/2011).
La masacre ocurrió a las 8.30 am local, poco después del ingreso de los niños a la Escuela Municipal Tasso de Silveira, en el barrio de Ralengo, zona oeste de la capital carioca, cuando un ex alumno de 23 años entró armado a la institución y abrió fuego contra los estudiantes dentro de las aulas y luego de ser baleado por la policía se suicidó. Como consecuencia del ataque, murieron 12 jóvenes, de entre 12 y 14 años, y otros 12 resultaron gravemente heridos de bala. Cuatrocientos alumnos estudian allí, del cuarto al noveno año.
Es la primera masacre de este tipo que ocurre en Brasil. El autor del crimen identificado como Wellington Menezes de Oliveira, dejó una carta testamento con referencias al fanatismo religioso, rechazando a los "impuros" y pidiendo que "Jesús lo despierte del sueño de la muerte a la vida".
La presidenta de Brasil, Dilma Rousseff, en Brasilia, suspendió un acto para dedicar un minuto de silencio, en llanto, "por los brasileritos que se fueron tan pronto" por un episodio, "que no es característico de la violencia en Brasil".