Una nena se dio cuenta de que le habían crecido vellos en la pelvis.
Sintiéndose preocupada le preguntó acerca de ello a su mamá y
ésta, con toda calma le dijo: “Esa parte del cuerpo se llama mono, y
puedes estar orgullosa de que a tu mono le hayan crecido vellos.” La
niña sonrió.
Durante la cena le dijo a su hermana: “A mi mono le han crecido vellos.”
Su hermana sonrió y dijo: “Eso no es nada. El mío ya come bananas.”
Mamá se desmayó.