Para los que tienen
su media toronja y los quieren y quieren...
¡ felicidades y envidia de la
buena...¡
A todos alguna vez nos
dieron "en todìsima la torre", todos pasamos por alguna decepciòn, algunos
amamos y no nos "pelaron" y a algunos otros nos amaron y no "pelamos"... nomàs
para no volverla a regar otra vez, cuando nos toque que nos "hagan ojitos y nos
quieran apapachar en lo oscurito", porque ya no estamos para que nos dèn otra
vez y por donde mismo... les comparto este artìculo...
LAS RELACIONES DE AMOR
Hombres y mujeres siempre han mirado la
relaciòn amorosa como el estado de felicidad perfecta; esto no siempre se dà
porque cada ser tiene una personalidad que muchas veces no encaja con la
personalidad de otro.
Antes de iniciarnos en una relaciòn
amorosa estamos a la expectativa de encontrar a una persona que sea de tal o
cual manera, con un cuerpo asì, de tal o cual posiciòn social. Es cierto que
algunos factores influyen para que una relaciòn funcione como son: el medio
cultural, las afinidades, el medio familiar, econòmico, etc.
En otras ocasiones no encontramos al
ser querido porque solo estamos dispuestos a permitirnos encontrar el perfil que
hemos predeterminado, teniendo en ocasiones personas a nuestro lado que se
interesan en nosotros, en incluso nos aman, pero nos empeñamos en rechazar
factores como el fìsico, entonces dejamos de reconocer que esta persona tiene
valores suficientes como para relacionarnos como pareja. Hay seres humanos que
permanecen años en soledad porque sin estos paràmetros no permiten que alguien
entre en sus vidas.
Entonces hay quienes aceptan a alguien
sabièndo que no llenan todas sus expectativas y no se involucran realmente con
la relaciòn. La persona que ama, en nombre del amor, permite que la otra
persona le haga daño, y deja que surja una relaciòn Sado-Masoquista, sin
detenerse a pensar que està resultando màs afectado que el otro. Si hay ruptura,
el que queda todavia enamorado, se paraliza porque deja de vivir plenamente y se
encierra en una celda de dolor y sufrimiento hasta
doblarse.
Si ya hemos descubierto que que la
relaciòn no tiene futuro, lo màs sano y aunque sea doloroso, que debe hacerse
es:
a) Tomar la decisiòn de apartarnos de
quien nos està haciendo daño o no nos ama, asì no aumentamos màs la carga de
dolor en nuestra vida y no herimos o fastidiamos al otro, esperando y rogando
amor.
b) Ser conscientes de que estamos
vivièndo una crisis sentimental, pero que vamos a salir de
ella.
c) Tener voluntad constante y fèrrea
para la decisiòn que hemos tomado
d) No auto-compadecernos con
pensamientos de pobreza de nuestro ser, ni perder la
autoestima
e) Querernos a nosotros mismos buscando
nuevas alternativas para descentralizar el dolor
f) Agradecer lo bueno que vivimos al
lado de ese ser: alguna lecciòn teniamos que
aprender
g) Respetar la decisiòn del otro, asì
sintamos que fuimos perdedores o manipulados
h) No buscar venganza, ni rogar, ni
implorar
i) Recordar que el amor se recibe
libremente, no a la fuerza
j) Hay que desahogarse, llorar esta
permitido para todos los seres humanos
k) Continuar vivièndo
l) Pero sobre todo...
perdonar
Siguiendo estos pasos que pueden ser
dolorosos, lograremos finalmente crecer en nuestras relaciones pròximas
superando los errores vividos, liberarnos del dolor y liberar de nuestro ser y
presencia a la otra persona, seremos personas mas libres para las nuevas
posiblidades que la vida nos brinde. Habremos obviamente de cambiar de nuestro
patròn fijo de què persona queremos, podremos aceptar y permitirnos vivir una
relaciòn màs amplia de pareja.
El merecimiento no siempre es
egolatrìa, sino dignidad. Cuando damos lo mejor de nosotros mismos a otra
persona cuando decidimos compartir la vida, cuando abrimos nuestro corazòn de
par en par y desnudamos el alma hasta el ùltimo rincòn, cuando perdemos la
verguenza, cuando los secretos dejan de serlo, al menos merecemos
comprensiòn.
Que se menosprecie, ignore o desconozca
friamente el amor que regalamos a manos llenas, es desconsideraciòn. Cuando
amamos a alguien que ademàs de no correspondernos desprecia nuestro amor y nos
hiere, estamos en el lugar equivocado, esa persona no es merecedora del afecto
que le prodigamos.
La cosa es clara: Si no me siento bien
recibido en algun lugar, empaco y me voy. Nadie se quedarìa tratando de agradar
y disculpàndose por no ser como les gustarìa que
fuèramos.
No hay vuelta de hoja. En cualquier
relacion de pareja, no te merece quien no te ame y menos aùn, quien te lastime.
Y si alguien te hiere reiteradamente "sin mala intenciòn", puede que te merezca,
pero no te conviente
Walter Riso