Lograr que un spot tenga diez millones de visualizaciones en una semana es algo que solo se puede conseguir de dos maneras: invirtiendo un dineral en una campaña de promoción o dando con la tecla para que el anuncio se convierta en viral. Lógicamente, la segunda opción es con la que sueñan todas las marcas.

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La compañía de teléfonos tailandesa True Move H puede presumir de haberlo conseguido, gracias a una emotiva pieza que es sin duda una de las sensaciones actuales de la red. Muchos de los que la han visto no tienen reparos en confesar que se les ha escapado una lagrimita…

El anuncio arranca mostrando a un niño al que han pillado robando en una farmacia medicinas para su madre enferma. La dueña no para de abroncarle, hasta que el propietario de un restaurante cercano acude a su rescate. No sólo paga los medicamentos al joven, sino que le indica a su hija que le traiga una ración de sopa.

30 años después se ve al mismo hombre en un hospital tras sufrir un desmayo en su restaurante. La operación para salvarle la vida es muy cara, y su hija no puede costearla. Su decisión desesperada es poner a la venta el negocio familiar, pero de repente ocurre un milagro: la factura está pagada. Es fácil adivinar quién la ha abonado, pero merece la pena ver el anuncio completo para acabar de dar forma a la historia.

Quizá lo que menos encaje de todo es que se trata de un anuncio de una compañía telefónica. Su eslogan, “Dar es la mejor comunicación”, busca darle un sentido a la vinculación entra la marca y el spot. Sin embargo, hay quien considera que todo es un poco forzado y que no hay conexión posible.

Lo que está claro es que han sabido tocar la fibra sensible del espectador para que se emocione con el spot y lo comparta con su entorno. Su éxito recuerda en gran medida a la nueva campaña de Guinness, aunque en el caso de la marca de cerveza irlandesa el mensaje que transmite tiene más coherencia con sus valores.