SUEÑO. Porque soñar no cuesta nada y alivia mi pensamiento, porque quizás mi sueño pueda cumplirse,
porque soñar me hace felíz.
LLORO. Porque llorar purifica mi alma y alivia mi corazón, porque mi angustia decrece, aunque sólo sea por momentos.
SOY FELIZ cuando veo que todas las personas que quiero lo són.